El accionar político de algunos dirigentes es absurdo y contradictorio.
Sus complejos y limitaciones desembocaron en una fatua sobrevaloración.
El presidente tiene la obligación de defender su dignidad y el sagrado honor patrio.
La integridad de un Estado es fruto de la convergencia de un ordenamiento jurídico adecuado.
El Dr. Roberto Proaño Santana, ejemplo de responsabilidad, deja el legado incomparable de un ser bueno y excepcional.
“La buena administración de la Justicia es la columna más firme de un buen gobierno”.
Nuestro país “isla de paz” se ha transformado en un campo de batalla.
¿No será mas conveniente que, a través de la muerte cruzada, se desarme la sedición permanente de la Asamblea?
Se han multiplicado los asaltos a domicilios de bandas integradas por delincuentes armados que amordazan y maltratan a sus víctimas.
Salvemos la democracia, repudiemos la solicitud de juicio político al Presidente de la República.
La codicia ilimitada de volver al poder para incrementar las riquezas mal habidas, amenaza al país.
Respetuoso y tolerante del criterio ajeno, no emitía conceptos injuriosos en contra de ninguna persona.
La rebeldía de la ciudadanía ha quedado conculcada por el terror impuesto por el gobierno coimador.
Rescatemos la dignidad histórica del pueblo ecuatoriano y frenemos definitivamente las amenazas de los potenciales tiranos.
Desgraciadamente el presidente es víctima de una Asamblea que prepara su destitución.
La opinión pública exige claridad y veracidad de los resultados electorales, que vuelven a sembrar dudas.
El pueblo ecuatoriano ha dado respuestas frustrantes para una mayoría de compatriotas en la última
“No importa que robe porque hace obra"
Durante siglos la viruela había matado a millones de personas y devastado civilizaciones enteras.
En un país imaginario, destacaba una intensa y prolífica labor de una mayoría de asambleístas, tan pero tan productiva