¿Las mujeres deben retrasar el inicio de su vida sexual en el Ecuador?

Las declaraciones de Alexis Mera en relación al inicio de la vida sexual de las mujeres causo reacciones en distintas esferas. Foto: Pixabay

Las declaraciones del secretario Jurídico de la Presidencia de la República, Alexis Mera, provocaron reacciones este 17 de marzo del 2015. Él aseguró en una entrevista a este Diario que el Estado debería enseñar a la mujer a retardar su vida sexual, para su desarrollo. Además que se debe promover su inserción educativa.
Según Marcela Benavides, socióloga y experta en género, los valores no son una categoría que deben definir una política estatal. “Este discurso no es política pública ni es pertinente para su desarrollo. Hay derechos que están bien definidos en los acuerdos internacionales y en la Constitución”.
La perspectiva en este caso es patriarcal –agrega- y asume la violencia de género en el espacio intrafamiliar como un problema individual y no de una sociedad patriarcal. Esto produce que la violencia sexual termine otra vez siendo responsabilidad de las mujeres.
León Sierra, actor y activista Glbti, coincide. Para él, lo ocurrido muestra un desinterés en torno a la mujer como ser humano pensante e independiente. “Es una concepción arcaica respecto al derecho del ser humano a decidir sobre su cuerpo y del amor que puede aparecer en cualquier momento de la vida. Lo que tiene que hacer el Estado es garantizar el acceso a las personas a la universidad y a la información sobre la salud sexual”.
Sierra dice que se necesitan de programas de educación para la sexualidad libre y para ejercer el derecho del ‘cuerpo soberano’. “Programas como Plan Familia lo que hacen es negar a la mujer. El estado tiene que garantizar el acceso y libertad para que las personas utilicen su cuerpo para llevarlo a la universidad o a la cama, pero el Estado no puede entrar a la cama de los ciudadanos”.
En el Ecuador, entre el 2010 y el 2014, el embarazo en las mujeres entre 15 y 19 años disminuyó del 60,61% al 56,08%. Sin embargo, los embarazos en adolescentes entre 10 y 14 años subieron en ese período de 1,98% a 2,16%, según el INEC.