Regresar al trabajo, un reto para los padres primerizos

Lactancia materna. Foto: EL COMERCIO

Las actividades en la casa cambian con la llegada de un bebé. Las responsabilidades son compartidas entre mamá y papá con el objetivo de velar por el bienestar del niño.
Por ello se otorga una licencia o permiso por maternidad a las futuras madres que están afiliadas al seguro social para que por 12 semanas remuneradas puedan cuidar del pequeño.
Pero ¿qué pasa cuando este tiempo se termina?. María del Pilar Rosero, parvularia, indica que el regreso al trabajo no debe ser un obstáculo para seguir afianzando los lazos con el bebé. “Es muy importante que los padres no sientan culpa ya que esto le transmiten al niño y la convivencia se hace más difícil”.
Una de las alternativas para que los pequeños no sientan mucho la ausencia de los padres es colocar en la cuna prendas que le recuerde a su mamá ya que esto ayudará a que se sientan seguros. “Los bebés se adaptan con facilidad en especial en los primeros días a pesar de que necesitan más cuidados”, dice la especialista.
Mónica Delgado tuvo a su primer hijo, Rubén, hace cuatro meses. Durante este tiempo ella pudo compartir con su bebé las etapas del crecimiento pero pocos días antes de retomar sus actividades laborales entró en angustia. Lo primero que analizó con su esposo Pablo Rivas era el lugar en el que dejarían al pequeño las horas que sus padres no estarían con él. Buscaron desde guarderías hasta niñeras que quieran ir a la casa. “No sabíamos que hacer ya que no queríamos dejar a nuestro hijo con personas sin experiencia ya que muchas noticias han salido sobre la violencia a los niños”.
Hasta que una tía de Pablo se ofreció ayudar a la pareja. Después de resolver este problema, Mónica no sabía cómo debía amamantar a su bebé las horas que esté fuera de casa. El pequeño Rubén nunca había tomado leche de fórmula ni mucho menos había usado biberón. Para los padres primerizos este fue un problema al inicio.
“Cuando los papás no saben qué hacer con los niños, muchas veces toman decisiones erradas como dejar de trabajar, en especial la mamá. La lactancia es uno de los parámetros que más les preocupa”, dice Rosero.
Los primeros días Mónica pedía permiso en el trabajo cada dos horas para ir a su casa amamantar al bebé. Sin embargo esto no duró por mucho tiempo. Así que decidieron consultar con su pediatra que les indicó que la leche materna puede ser refrigerada para alimentar al bebé. Además se puede optar por el uso de una cuchara pequeña para darle de comer y no usar el biberón.
Rosero indica que para muchas madres dejar de alimentar a su bebé es una actividad frustrada ya que esto les ayuda a crear lazos más fuertes entre ambos. Sin embargo esto no debe ser un impedimento para que sigan desarrollando sus labores antes de que se queden embarazadas.
Aspectos de la conservación de la leche materna:
Recuerde que se puede conservar 10 horas a temperatura ambiente. Pero lo ideal es guardar la leche en el refrigerador (a una temperatura entre 0 y 4 grados) de 5 a 8 horas.
Se debe almacenar en recipientes de plástico grueso o vidrio y en pequeñas cantidades entre 60 y 120 milímetros a la vez ya que esta es la cantidad adecuada para que tome el bebé. Ponga la fecha y hora de extracción, tanto en las bolsas como en los envases
Para descongelarla, póngala bajo el chorro de agua caliente o sumerja el recipiente en una fuente con agua tibia. Nunca añada otros productos ni agua caliente.
Además, las madres deben sacarse la leche cada dos o tres horas para poder producir toda la leche que el bebé necesita.
Lo mejor es utilizar cada día la leche de la jornada anterior y tener una reserva congelada para emergencias.
Para que mamá y papá estén tranquilos durante el trabajo, lo mejor es que dejen a sus hijos con personas de confianza o en centros de atención que estén certificados. Además si se contrata a una niñera se puede pedir a un familiar que vaya a la casa de vez en cuando para asegurarse de la condición en la que se encuentra el bebé.
Rosero manifiesta que cuando la mamá y el papá regresen del trabajo deben dedicarle el mayor tiempo a sus hijos para que ellos no sientan su ausencia.