Las fincas y haciendas ya no solo son espacios destinados para el uso particular. En Manabí, al menos unos 20 de estos lugares son una suerte de vitrina, donde se permiten visitas guiadas para conocer todas las tradiciones del pueblo montuvio. Esos sitios están entre los cantones Portoviejo, Sucre y Santa Ana.
El pequeño poblado de raíces montuvias de Puente Lucía, en periferias del norte de Guayaquil, obtuvo tres de los premios del concurso Mejoremos nuestra cuadra del Municipio de Guayaquil. Este busca mejorar la imagen de los sectores populares de la ciudad y la autoestima de los moradores.
Los jóvenes manabitas se alistan para adentrarse a lo más profundo de las costumbres del pueblo montuvio. Esto será con motivo del sexto taller vivencial de identidad, que realiza cada año la organización Asuntarte, de Portoviejo. Entre el 14 y 16 de febrero del 2020, unos 100 jóvenes y activistas culturales escalarán al cerro La Victoria de la parroquia Chirijos, de la capital de Manabí para aprender las costumbres de sus ancestros.
El registro más antiguo de un amorfino data de 1881, año en el que el antropólogo español Marcos Jiménez de la Espada presenta en el Congreso de Americanistas el que se presume como la primera pieza con música y letra. “Amorfino no seas tonto /aprende a tener vergüenza / al que te quiere querelo / al que no, no le hagas fuerza”, reza el coro.
Las vivencias ancestrales de los pueblos montuvios y afrodescendientes motivaron a un grupo de jóvenes a rescatar esas historias a través del teatro.
La iniciativa arrancó en mayo pasado con la firma de un acta de compromiso para la conformación de una mesa interinstitucional que apuntale el proceso de reconocimiento, investigación, declaratoria y elaboración del plan de salvaguardia de ‘Manabí como provincia chola-montubia’.
La danza, que es representada en los amorfinos tradicionales del pueblo montuvio, recoge una serie de episodios de los ancestros manabitas. Ahora busca tener más espacios en la cultura de la provincia. Al menos cinco grupos de baile autóctono conformaron un frente para que este arte sea considerado en los actos públicos-culturales que se celebren.
La marca 100% Chonero representa la identidad montuvia de ese cantón manabita. Fue creada por el artista Rider Delgado hace 20 años. Él recuerda que mientras vivía en Quito frecuentaba un bar de un amigo, que se caracterizaba porque la mayoría de clientes era manabita.
Los orígenes del rodeo montuvio se remontan a las fiestas de fandango de la época colonial que comienzan a unir expresiones culturales y simbólicas del mestizaje, según apunta el investigador y folclorista Wilman Ordóñez Iturralde.
La agrupación Son Montuvio encontró en la música y la danza otra forma de rescatar las tradiciones del pueblo manabita. Desde el 2013, cuando apenas eran un dúo, Eduardo Mendoza y Víctor García fueron recopilando algunas estrofas de conocidos amorfinos que con el paso de los años se hicieron canciones.
El festival de danza contemporánea Fragmentos de Junio, que se realiza en Guayaquil, le hace un gran guiño al “disfrute de un proceso cultural identitario”, el del baile folclórico costeño, con la organización para fin de mes de un encuentro público para bailar a manera de flashmob (multitud relámpago) el tema montuvio Alza que te han visto.
El dorso de la mano de Tomasa Fariño es suave y arrugado, pero sus palmas son firmes, duras por los callos, producto de la exigencia de su trabajo. A sus 85 años se gana la vida torciendo y tejiendo paja de mocora, con la que hace hamacas.
Despertar el interés en las nuevas generaciones del pueblo montuvio es uno de los objetivos que puso en marcha el colectivo Son Montuvio, en la provincia de Manabí.
En las comunidades Pepa de Huso, La Sequita y Picoazá los hallazgos ancestrales que dieron las primeras pistas sobre la cultura manabita continúan.
Manuel Gonzaga es machaleño, productor de cultivos de ciclo corto, moringa y sacha inchi. Fue presidente de Juventudes del Pueblo Montuvio del Ecuador y del gremio en El Oro. Desde noviembre del 2017 dirige Pueblo Montuvio del Ecuador, que aglutina a organizaciones rurales de la Costa. ¿En qué se sustenta el pedido de la creación de una Secretaría Nacional del Pueblo Montuvio?
Amorfinos, contrapuntos y teatro costumbrista del compadre Justo (Gabriel Paredes) y de la comadre Filomena (Carola Vaca) animaron la primera visita del año del Museo Itinerante ‘Viajando por el Guayas a través de su historia’, que se instaló en la Unidad Educativa 21 de Julio, en Yaguachi, en Guayas.
Los murales del pueblo montuvio que se observan en todo Manabí son fruto de la inspiración de un grupo de guardianes de las tradiciones de esta etnia. En cada espacio en el que están plasmadas las ideas de los artistas se retrata la realidad cotidiana de sus habitantes. Esta población encuentra, en estos espacios, una forma de mantener sus costumbres y transmitirlas de manera visual hacia las generaciones más jóvenes.
En el escenario principal del Teatro Sánchez Aguilar, en el sector de la vía a Samborondón, se ha instalado una pequeña ‘mancha’ de guadúa. Largas varas de caña, de hasta seis metros, reemplazan a los mástiles del circo, sujetos en la base a voluminosos fardos de paja.
El pueblo montuvio de a poco se visibiliza en otras partes del país y por fuera de las zonas donde tradicionalmente habitaron sus ancestros. La mayor presencia de este grupo étnico está en las provincias de Manabí, Guayas, Los Ríos, El Oro y Santa Elena.
La música montuvia se mantiene vigente en Manabí y varios estudios han rescatado su historia e importancia.