Tengas o no un gatito en casa debes aceptarlo: esos animalitos son muy tiernos. Con sus monerías han conquistado el corazón de miles de personas alrededor de mundo. Lo hacen a través de los videos que sus tutores colocan en las diferentes redes sociales.
En los audiovisuales se los observa corriendo detrás de pelotas de papel o brincando sobre su cuidadora. También destruyendo el papel higiénico y las cortinas, o lanzado objetos desde las alturas. ¡Qué ternura!
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Pero ¿Por qué nos fascinan los videos de gatos?
La ciencia tiene la explicación. Además de divertirnos, los videos de gatitos despiertan nuestra ternura; nos producen satisfacción emocional.
A esa conclusión llegó un estudio liderado por Jessica Gall Myrick y titulado ‘Who watches Internet cats, why and to what effect?’ (‘¿Quién mira a los gatos en internet, y qué efecto les produce?’).
El informe destaca que las personas que tienden a procrastinar, como aquellas que sienten una necesidad emocional reprimible de satisfacer cierta felicidad inmediata porque se sienten insatisfechos, pueden ser las personas con mayor grado de aceptación de los videos y foto de gatos.
Esta es la explicación química
El ser humano posee una hormona llamada oxitocina, relacionada estrechamente con la empatía, justo lo que despiertan los videos y fotos de esos felinos.
Ese acto de segregar oxitocina también calma emociones y genera un sentimiento de felicidad automático. Seguramente ahora mismo estás sonriendo tras recordar alguna monería de algún gatito que viste en la Internet.
Videos de gatos activan la oxitocina: esto dicen los expertos
Conocida, entre otros nombres, como hormona del abrazo, del apego o del amor, la oxitocina tiene múltiples funciones. Es fundamental -por ejemplo- en la lactancia materna.
Según un informe de la Universidad Complutense de Madrid, esa hormona es imprescindible para amamantar a las crías, tanto en animales como en seres humanos.
Es imposible hacerlo sin oxitocina.
Mayo Clinic Health Letter añade que la oxitocina ayuda a interpretar las pistas sociales, permitiendo a las personas evaluar las expresiones faciales y juzgar si se trata de amistad o enemistad. Esa hormona ambién desempeña un papel en la manera de responder al estrés gracias a su efecto calmante y contrario a la ansiedad.