La Asamblea Nacional francesa legalizó este martes la eutanasia. Así se suma a otros países de su entorno, como Países Bajos o España, que ya legislaron a favor de la medida. Otros como Alemania o Italia no dan el paso para legalizar la muerte asistida.
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Francia aprobó en primera lectura una proposición de ley que legaliza y regula por primera vez la eutanasia para enfermos incurables que padezcan sufrimientos insoportables. Aunque todavía queda pendiente que el texto pase al Senado en otoño. Esto debe ocurrir antes de volver a la Asamblea para su debate en segunda lectura, previsiblemente a comienzos de 2026.
El camino para legalizar la eutanasia lo iniciaron otros países europeos hace décadas, como fue el caso de Países Bajos. Su Parlamento aprobó en abril de 2001 la ley, que daba luz verde a la eutanasia y entró en vigor un año después.
Bélgica también fue de los primeros en Europa en aprobar la medida. Junto con su vecino neerlandés, el único país que ha extendido la legislación también para niños y adolescentes. Ambos países autorizan la eutanasia en condiciones muy estrictas y bajo supervisión médica. Los requisitos son similares a los que tiene Luxemburgo, que se sumó a sus vecinos en el 2009.
La eutanasia sigue con trabas
El pasado 29 de noviembre de 2024, la Cámara de los Comunes (baja) del Parlamento británico aprobó una proposición de ley para legalizar el suicidio asistido en Inglaterra y Gales. Pero actualmente la eutanasia como este otro procedimiento son ilegales en Reino Unido.
La proposición de ley, que permitiría que los mayores de 18 años que padecen una enfermedad terminal puedan recibir asistencia para morir (siendo el enfermo quien tome el medicamento, sin nadie más autorizado a administrarlo), sigue en trámites parlamentarios.
En el caso de Portugal, habrá que esperar para poder solicitar la eutanasia en territorio luso, ya que el Tribunal Constitucional tumbó en el pasado mes de abril la ley que regula el procedimiento, aprobada en mayo de 2023.
El texto, que contempla que solo pueden recibir la eutanasia los mayores de 18 años y cuando el suicido asistido fuera imposible por incapacidad física del enfermo, tendrá que volver al Parlamento para ser modificado por la nueva cámara salida de las elecciones del 18 de mayo con una mayoría de derechas reforzada.
En Alemania, el suicidio asistido se encuentra en un limbo legal, ya que el Tribunal Constitucional del país lo descriminalizó en 2020, lo que volvió necesario legislar de nuevo la cuestión, algo que sin embargo no ha ocurrido.
Los médicos tienen la posibilidad de suministrar a un enfermo terminal los medicamentos necesarios para poner fin a su vida, pero no están obligados a hacerlo ni el paciente dispone de un derecho a ello. Aun así, en 2024 se produjeron en Alemania 977 casos de asistencia al suicidio, un centenar más que el año anterior.
Otros países continúan cerrados a la idea
En Italia, la legalización sobre la eutanasia parece lejana, aunque el Tribunal Constitucional abrió la puerta en 2019 a despenalizar ciertas formas de suicidio asistido.
Este mayo, la misma corte pidió al Parlamento que tramite una ley que regule la eutanasia, después de que el Gobierno de Giorgia Meloni anunciara la impugnación de una ley regional aprobada en Toscana, que busca poner fin al vacío legal actual y que abrió una disputa con el Ejecutivo, conservador y contrario a medidas de esta índole.
Por su parte, Rusia prohíbe la eutanasia por ley, con un Código Penal que trata el procedimiento como un asesinato que conlleva el respectivo castigo.
Sin embargo, una encuesta realizada en verano de 2024 muestra que el 49 % de los rusos apoyan la legalización de la eutanasia para enfermos incurables.