Alimento deshidratado guarda los nutrientes de la comida

Para preparar un plato de Snouts se debe agregar agua y esperar cinco minutos antes de servir el plato. Foto: Cortesía Jorge Luis Gómez. Modelo: Paquito @@paquitothebullyec

Cada vez son más las opciones para alimentar a los animales de compañía. Desde hace algunos años la industria alimenticia de las mascotas ha experimentado con nuevas presentaciones para que los peludos tengan una dieta equilibrada.
El balanceado tradicional o alimento seco es la opción más común. Otra opción es la dieta BARF (comida cruda), popular porque no contiene preservantes y es similar a la dieta natural del lobo. La comida deshidratada está viviendo un acelerado crecimiento en todo el mundo. En Ecuador ya se empiezan a ver los primeros productos formulados específicamente para perros.
Uno de ellos es Snouts, un emprendimiento guayaquileño que lanzó sus primeras cuatro recetas. El producto tiene una consistencia similar a la granola y para prepararla solo hay que agregar agua y esperar unos minutos. Cuando está listo, el producto tiene un sabor agradable para los animales.
Para deshidratar la mezcla se utilizan temperaturas de hasta 50° centígrados. Eduardo Aragón, médico veterinario y Ph,D. en Nutrición Animal, explica que para elaborar estas recetas se utiliza un proceso que no destruye los nutrientes. “La deshidratación a menos de 70°C es muy segura y ayudará a preservar las vitaminas, aminoácidos y demás nutrientes”, dice el especialista.
Alegría Gómez creó el producto junto con María Paula Gómez y Gabriela Idrovo. Para ellas era importante formular un alimento que sea nutritivo. Utilizan proteína de pechuga, pierna y muslo de pollo. También carne magra de cerdo, quinua, papa, apio, zanahoria, espinaca y otros ingredientes. Otro beneficio es que no contiene gluten.
La cantidad de comida que necesitan los animales depende del tipo de alimento, su formulación y el porcentaje de agua que contienen. En alimentos deshidratados, por ejemplo, los nutrientes están más concentrados. Por esta razón la porción diaria puede ser hasta un 15% menor a la tradicional, según Aragón.
Otro emprendimiento es Canne. Este producto no es una comida completa sino un ‘snack’ o golosina. Se trata de vísceras deshidratadas de alta palatabilidad (sabor agradable para los perros). Utilizan tráqueas, corazón e hígado de res.
Valeria Arias, representante del producto, cuenta que la idea nació en 2017. En ese año llegó Renzo, un bulldog inglés a su familia. "Esta raza enfrenta problemas de salud, especialmente con obesidad y alergias", contó. Además de utilizar la dieta Barf para su mascota, crearon un snack natural.
Aragón considera que estas son buenas opciones para complementar la alimentación de las mascotas. “No son huesos, por lo que son seguros. Además también guardan proteína que es necesaria para los animales de compañía”, aclara.
Otros beneficios de este tipo de alimento es un pelaje más brillante, heces más compactas y con menos olor y un mejor control sobre la nutrición. La única contraindicación es para los animales que sufran alguna enfermedad. En estos casos se recomienda consultar al médico antes de cambiar la dieta del can.