La fachada translúcida permite una óptima conexión entre el interior y el entorno. Foto: www.archidaily.com
Para los ecuatorianos, acostumbrados a tener mercados estrechos, antifuncionales y hasta feos, el nuevo mercado cubierto que se acaba de inaugurar en Róterdam debe convertirse en un ejemplo y una guía.
De hecho, el flamante Markthal ya es un ícono para esa ciudad (Rotterdam en neerlandés) situada al oeste de los Países Bajos, sobre el río Mosa y cerca de La Haya.
Como informa https://www.archdaily.com, el nuevo emprendimiento comercial se emplaza junto a la estación Blaak y el mayor mercado semanal al aire libre de alimentos.
El Markthal incluye una enorme planta de mercado en la primera planta sostenida por un arco de departamentos. Su forma, su colorido interior y la altura convierten a Markthal en un espectáculo único.
La combinación de un edificio residencial que cubre un mercado de alimentos frescos con tiendas de alimentación, restaurantes, un supermercado y un estacionamiento subterráneo no se encuentra en ninguna otra parte del mundo.
El proyecto nació en el 2004. El Municipio de Róterdam quería aumentar el mercado libre existente con una adición cubierta y organizó un concurso abierto.
Este fue ganado por el estudio de arquitectura Mvrdv, sigla formada por las iniciales de sus fundadores: Winy Maas, Jacob van Rijs y Nathalie de Vries.
La propuesta del estudio fue cambiar la tipología común de los mercados oscuros y con poca conexión con el entorno por un gran bloque curvo de departamentos de 120 m de largo, 70 de ancho y 40 de altura.
Esta C invertida cubre una gran sala con dos inmensas aberturas hacia la ciudad; cerradas con vidrio templado para protegerla del viento y la lluvia.
Para que los cerramientos fueran lo más transparentes posible, cuenta https://www.plataformaarquitectura.cl, Mvrdv optó por una fachada de cable de acero con pocos elementos constructivos. El principio es similar al de una raqueta de tenis, explica Winy Maas: los cables hacen de cuerdas entre las que se fija el vidrio.
Es la fachada de cable de acero más grande de Europa y permite ver muy bien desde fuera la obra de arte del interior: un gran mural curvo que refleja la flora de la región.
El revestimiento exterior es de piedra natural gris, la misma utilizada en el pavimento del mercado y la plaza circundantes. Hay seis entradas que conducen a ascensores y escaleras dobles. Existen accesos en la primera y décima plantas.
El mercado recibió el certificado Breeam Very Good por sus equipamientos y tiene un ambiente confortable con mínimo consumo de energía.