La milanesa es un platillo popular en varios países, pero es insignia en Argentina. Foto: Freepik
La milanesa es un platillo sencillo de preparar y muy sabroso al paladar. Consiste en un filete de carne o pollo con rebozado, es decir, con una mezcla de pan molido y huevo, y puesto a freír u hornear. Otras versiones también incluyen carne de cerdo, pescado y soya.
En Argentina es el platillo insignia, pero en otros lugares también es un bocadillo popular. Según recoge Infobae en su portal, este habría llegado a la patria de la bandera albiceleste cuando una migración del pueblo italiano se instaló allí.
El investigador gastronómico de origen italiano Giovanni Fancello sostiene que la milanesa se come desde el medioevo. Fancello, integrante de la Asociación Italiana de Gastronomía Histórica, menciona que en la cocina de aquella época el hecho de empanizar era un procedimiento habitual.
En un recetario de 1880 que se llamaba ‘Almanaque de la Cocina Argentina‘ ya se menciona a la milanesa con papas fritas, señala la historiadora Carina Perticone a Infobae. En aquella publicación la milanesa ya lleva pan rallado y queso parmesano.
Un dato curioso que se indica en la publicación es que la milanesa napolitana, aquella que va acompañada de queso, jamón y tomate nació a causa del error de un chef. En la década de los 50 un asistente de cocina argentino quemó la milanesa que había ordenado un comensal y para corregir el sabor a quemado decidió cubrir el filete apanado con tomate, jamón y queso, y gratinarlo.
Un verdadero manjar resultó aquella improvisación a la que se bautizó de milanesa napolitana y fue agregada al menú del restaurante.