La humedad acaba con las construcciones. Para combatir este problema se pueden colocar en pisos, paredes y techos membranas de asfalto polimerizado. Esta técnica impermeabiliza totalmente las viviendas de la humedad.
El procedimiento se lleva a cabo cuando ya están colocados los cimientos, es decir, cuando ya está levantada la estructura de hormigón de la vivienda.
En el caso de comenzar por el suelo, primero se compacta la arena. Concluido este paso, se colocan las mangueras y la tubería PVC destinadas a las instalaciones eléctricas y sanitarias.
El tercer paso es el imprimado. Consiste en colocar con un rodillo una emulsión asfáltica sobre las cadenas de hormigón.
Posteriormente, al mismo tiempo que son desenrolladas en el suelo, las membranas son soldadas sobre las cadenas de amarre con un soplete a gas butano que alcanza 1 000°C. La emulsión que se colocó previamente permite una mejor adherencia de las membranas.
Denominadas como Super K 2500 y fabricadas por Chova, las membranas miden 1 m de ancho por 10 m de largo. Son colocadas de forma sobrepuesta progresivamente, sobre todo el suelo, con un traslapo de entre 7 y 10 cm.
Edwin León, técnico en impermeabilización, asegura que las membranas tienen una durabilidad indefinida, a diferencia del plástico de 15 micras que muchos constructores utilizan. Las Super K 2500 no son solo más resistentes por su armadura de poliéster, sino, también, por su mayor espesor: 2,5 mm.
Concluida la instalación de las membranas, el suelo está listo para recibir el hormigón del piso de la casa. Para cubrir un área de 100 m², se requieren 110 m² de membranas. Esta cantidad tiene un costo de unos USD 700.