Un día como hoy, en 1979, falleció en un fatal accidente de tránsito nuestro director Don Jorge Mantilla Ortega en esa peligrosa ruta entre Santo Domingo y Alóag, que ya tiene 50 años y sigue siendo mortal para muchos de los viajeros.
Jorge Mantilla nació un 31 de mayo de 1907, al año de vida del matutino quiteño que ya cumple 109 años. Don Jorge Mantilla alternó su vocación de periodista con altas representaciones diplomáticas en el exterior en las delegaciones diplomáticas de nuestro país en Washington y Lima. El señor Mantilla fue además embajador en Londres e Italia y representó al Ecuador ante la XVI Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, en el año 1961 y en la reunión de 1952 llevada a efecto en París. Además, Jorge Mantilla Ortega conformó la Junta Consultiva de relaciones exteriores de nuestro país.
Pero no solo la actividad periodística y diplomática formaron parte de su vida pública ya que fue diputado por la provincia de Pichincha y senador ante el Congreso Nacional en representación de la Prensa.
Junto a sus mayores, los fundadores de este Diario, su padre y su tío, bebió de las fuentes del quehacer periodístico y se inició en la crónica deportiva y hasta llegó a ocupar altos cargos como jefe de Información y Redacción de EL COMERCIO. Así mismo, fue Gerente de esta empresa, cofundador del diario fraterno Últimas Noticias, así como cofundador de Radio Quito, la Voz de la Capital.
Jorge Mantilla Ortega fue director de Diario EL COMERCIO en varias ocasiones.
El señor Mantilla fue uno de los fundadores e impulsores, en 1940, de la Unión Nacional de Periodistas (UNP), la prestigiosa entidad gremial que se ha caracterizado estos años por su defensa de la libertad de expresión, uno de los valores por los que Don Jorge Mantilla siempre bregó.
Los últimos esfuerzos cívicos, antes del trágico accidente que le segara la vida, se encaminaron a apoyar con convicción el proceso de retorno a los gobiernos civiles. En ese mes de abril se celebró la segunda vuelta electoral entre los candidatos Jaime Roldós y Sixto Durán Ballén.
Su vida y su ejemplo siguió la huella de sus mayores y marcó su vocación a las generaciones que le siguieron fieles a su idea de un periodismo libre, independiente y plural en el que creyó hasta su último día.