Amigable con el ambiente, silencioso, rápido, económico, son algunas de las ventajas que tiene el tren eléctrico y por consiguiente la mejor alternativa a largo plazo (cien años) para minimizar el problema de transporte terrestre masivo en el
Distrito Metropolitano de Quito, una ciudad cuyas dimensiones aproximadas son de 50 km de longitud en dirección sur-norte y 4 km de ancho de este a oeste, le vuelve ideal para implantar el sistema de Tranvía Eléctrico desde la Mitad del Mundo hasta la Terminal Terrestre Quitumbe, en lugar del metro o subterráneo, en un tramo de apenas 18 km, con un túnel desde La Y al norte, hasta la terminal El Recreo en el sur, a un costo más elevado del que se invertiría en el tranvía eléctrico, porque para su construcción se aprovecharían las vías ya hechas del trolebús, donde irían los tendidos de las rieles, así como el cableado aéreo que tiene el mismo sistema de transporte terrestre trolebús, es decir resulta mucho más económico construir el tranvía eléctrico que el metro subterráneo para Quito, puesto que no es necesario hacer túneles ni grandes estaciones para su funcionamiento, los tranvías son más fáciles y rápidos de usar en trayectos cortos y no tienen que descender varios metros hasta los andenes, el tranvía eléctrico se combinaría con el tráfico y un sistema de semáforos inteligentes le daría paso prioritariamente, para que solo se detenga en las estaciones correspondientes. Este sistema de transporte beneficiaría a 125 000 personas diariamente, pues la capacidad que tiene para transportar un tren de 6 vagones es de 1 200 personas (200 personas por vagón), y puede soportar sismos de hasta 9 grados en la escala Richter.