¿Pagar para que no te rayen el auto?
Lamentablemente los conductores nos hemos acostumbrado a pagar por el servicio “obligatorio” de los “cuida autos” informales en las calles de Quito. Algo que pudo haber empezado como una forma temporal de ganarse la vida para alguien en necesidad, se ha convertido en una mafia que amenaza y atemoriza a conductores.
Hemos tenido que recibir insultos, malas caras e incluso golpes o daños en nuestros vehículos, por el pecado de pagar “solo” 25 o 50 centavos al dueño de la calle. ¿No es algo voluntario? ¿Y si no se tiene dinero en ese momento?
Se justifica el cobro obligatorio estacionando en zona azul o parqueaderos privados pero hablamos de espacio público, la calle, lugar de todos y por el que ya pagamos impuestos. También se podría justificar el cobro si el conductor solicita ayuda para estacionar, lavar o cuidar el auto, etc. Pero prácticamente pagamos para que nos “permitan” parquear sin agresiones o para no ver nuestro auto rayado o golpeado por el propio cuidador al regresar. Y si, Dios no quiera, le pasa algo al carro ¿van a responder? ¿Hay alguna garantía? Quiero enfatizar que hay cuidadores amables y comedidos que sí ayudan pero lastimosamente muchísimos otros son limosneros con garrote que viven amenazando a chóferes en “su calle”.