Respetando en absoluto la libertad que tiene el Diario para titular sus reportajes, me permito considerar que el escogido para el reportaje sobre el perfil de la doctora Tania Arias vocal del Consejo de la Judicatura Transitorio, al resaltar que “La sombra del oficialismo persigue a Tania Arias”, induce al lector a formarse ciertas suspicacias en torno a la actuación de dicha vocal en el Consejo de la Judicatura, lo cual, comedidamente, me parece que no está bien. No conozco a la doctora Arias, pero al margen de esto, creo que es la hora de bajar banderas y estandartes frente a este proceso y construir una voluntad nacional para supervigilar la reestructuración de la Función Judicial, proceso en marcha por la decisión soberana del pueblo. El Consejo de la Judicatura Transitorio ha presentado un plan de acción, pues corresponde a la sociedad civil y a los medios, por supuesto, vigilar que actúen con absoluta independencia tanto frente a las demás funciones del Estado, cuanto a cualquier “poder fáctico” y a una denominada “oposición” que no ha formulado propuesta coherente alguna en torno de este proceso.