Ciclistas e inclusión

Sorprende leer muy seguido en este espacio, cartas de crítica a las obras de infraestructura y geometría vial para dar paso a vías exclusivas para ciclistas. Siempre consideré que esas eran medidas de inclusión social o de medios alternativos de movilidad. Pero lo que son "verdades lógicas" de aceptación general, hoy son cuestionadas, con razón o sin ella. Son tiempos de rompimiento de paradigmas, la ciudad de Dresde prefirió perder su calidad de Patrimonio de la Humanidad para poder construir un puente. Cuestionamos la explotación de petróleo en el Yasuní cuando hemos depredado media Amazonía ecuatoriana.

Las ciudades tienen nuevas demandas, o viejas aspiraciones con nuevos demandantes, queremos que no haya tráfico pero no estamos dispuestos a renunciar a nuestro vehículo, queremos una ciudad sin contaminación pero ¿cuánto estamos dispuestos a pagar por una ciudad que contamina poco? La campaña se acerca, es el mejor espacio para discutir la ciudad que queremos, esta ciudad no la podemos pensar fuera el país que queremos; Quito tiene la característica de ser un crisol nacional, no estamos dispuestos a falsas autonomías y separatismos. Quito es Pichincha y el Ecuador. Los tiempos de las autonomías y las descentralizaciones neoliberales terminaron; la ciudad "competitiva" el "territorio ganador" sin importarnos el resto de la provincia y del país no es el Quito que queremos, esta es una ciudad inclusiva e incluyente, donde deben primar los espacios públicos y librarnos de quienes creen que ser quiteño es contar dos anécdotas sobre el norte de esta ciudad.

Suplementos digitales