A pedido del Presidente, cuestionemos la legitimidad de que los medios de comunicación privados tengan derecho a informar. Para esto, busquemos estados donde se aplique tan avanzado pensamiento.
Encontramos esta filosofía moderna en países como Cuba, Irán, Venezuela, y el más avanzado de todos Corea del Norte. ¡Cómo no querer emular a semejantes naciones! No es coincidencia, que en estos estados, con conceptos de justicia más avanzados, hasta el Presidente y sus funcionarios tienen derecho a que nadie les robe la honra y la reputación, que según Correa es un delito “más grave que robar un celular, carro o casa”. Por eso en esos estados, los ladrones de honra son condenados de por vida, como es justo. Ahí sí que no hay la “simpática teoría de que el Presidente debe aguantar todo”.
Si queremos un paraíso de justicia debemos dejarnos guiar por el omnisapiente todopoderoso Presidente.