Dos niños, víctimas colaterales de balaceras en Guayas y Manabí

Hasta el hospital Verdi Cevallos de Portoviejo fue trasladado un niño de 8 años, víctima colateral de un caso de sicariato. Foto: Belén Mendoza OromarTv
Dos hechos violentos tuvieron como víctimas a menores de edad, en hechos diferentes, registrados en Manabí y Guayas en las últimas 72 horas.
Por una parte, un niño de ocho años falleció por una herida de bala en el pecho en el cantón Santa Ana (Manabí). Otro menor resultó herido cuando quedó atrapado en el fuego cruzado de una balacera en el sur de Guayaquil (Guayas).
Manabí
El primer caso se produjo la noche del jueves 25 de noviembre, sobre las 19:30, en una vía de segundo orden del sitio El Níspero en el cantón Santa Ana.
El menor de edad se movilizaba en una moto con un tío político, quien se detuvo a conversar con un conocido a quien sujetos en una moto balearon en ese momento en la calle, según las versiones de los familiares del menor.
El hombre resultó herido, pero sobrevivió al ataque. En cambio, el niño murió como víctima colateral. Los perpetradores se movilizaban en una motocicleta.
Williams Borja, jefe del Distrito Santa Ana de la Policía Nacional, informó que se cerraron vías de ingreso al distrito y se realizaron operativos de búsqueda "para hallar a los hombres de la motocicleta, pero no se pudo dar con las personas". La Policía levantó como indicios restos de proyectiles para las investigaciones.
La víctima fue identificada como Erick M. Fue trasladado a urgencias del hospital Verdi Cevallos de Portoviejo, donde se confirmó su muerte.
Guayas
En tanto que un niño de 10 años resultó herido de bala cuando quedó con su madre en medio de una balacera, en una persecución de policías a delincuentes en la cooperativa La Pendola, en el sur de Guayaquil.
Alexandra Maurat, madre del niño, presentó una denuncia en la Fiscalía la noche de este jueves 25. Ella contó que había salido con su hijo a la tienda cuando escucharon disparos.
"En eso mi hijo me dice, 'mami me dispararon'. Me tiré al piso con él, vi la sangre y el policía venía disparando", contó Maurat a medios de televisión local. La camioneta de los sujetos que escapaban de la policía se subió a la acera y casi le pasan por encima a la madre y al niño.
La bala rozó el glúteo del menor, pero no se alojó en su cuerpo. El niño fue trasladado al Hospital del Guasmo y luego al Hospital del Niño, donde se recupera. Su estado de salud es estable.