La elegancia que ofrece es la causa principal para la utilización del papel tapiz. En la actualidad, no solo se recubren las paredes con este material sino también los cielos rasos, vitrinas e, incluso, los pisos donde no hay circulación.
En estos últimos casos, el objetivo es resaltar el lugar o un adorno existente aprovechando el estatus que ofrece este material que, por lo general, es importado desde Norteamérica, Europa y Asia.
Para Kléber Angüisaca, gerente de la firma Angüisaca Kléber (Mödo), es una tendencia antigua que regresa con auge para el diseño de interiores de casas, departamentos, oficinas… “Hay nuevas tendencias y propuestas con materiales como el papel gamuzado”, dice el representante de esta empresa que se dedica a la dirección de proyectos, decoración de interiores y elaboración de muebles y mobiliarios.
En lo referente a los diseños estampados en estos papeles, la variedad es amplia, con opciones que se asemejan al cuero, texturas maderadas y una infinidad de colores y formas.
Hay diseños que evocan elementos de la naturaleza, otros del estilo Luis XV…, dice Angüisaca. “El objetivo principal es dar carácter a ciertas paredes en el interior de un inmueble”.
Los colores de moda son el plomo, turquesa, rojo, blanco, beige y azul intenso. Pero Angüisaca da un consejo con miras a su durabilidad.
El diseñador señala que al ser una alternativa decorativa para salas, comedores, otras áreas sociales o habitaciones se debe escoger un diseño y tonalidad que pueda transcender en el tiempo y que no pase de moda en el corto plazo.
Según él, si se escoge un estilo recargado o un color muy intenso, al poco tiempo cansará visualmente a los propietarios y se tendrá que reemplazar. Hay que considerar la inversión para luego tener que cambiar en seis meses o un año.
Entre sus recomendaciones están los papeles con texturas similares a la piedra. Otra novedad con el uso de este material es que llegó a los baños sociales donde no existe humedad.
Puede ser colocado en dos paredes unidas (en forma de L) o en una sola dependiendo del diseño del papel y el resto se pinta o se puede cubrir con porcelanato. Se puede contrastar una pared blanca con un papel tapiz turquesa o un café.
En la actualidad también se utiliza en los cielos rasos, dependiendo de la altura y luminosidad del lugar. Angüisaca dice que se necesita una altura mayor de lo convencional (2,40 metros) para que se aprecie mejor.
El arquitecto Patricio Caivinagua, especializado en interiorismo, habla de otros usos. Según él, se puede utilizar en pisos y negocios. Pone como ejemplo una vitrina de una boutique, porque el objetivo es dar carácter a esa estructura.
En el caso de los pisos debe colocarse en espacios donde no haya circulación como una esquina. Él dice que el diseño no se limita a un solo elemento o espacio y “no existen límites en el uso de los materiales”.
Incluso, agrega, puede ser usado en exteriores como las zonas aledañas a una piscina, pero recubierto con vidrio o una melanina transparente para que no se deteriore con facilidad por factores como lluvia, sol, polvo y humedad.
¿El cuidado? Se debe limpiar con una franela húmeda frecuentemente, pero no con exceso de agua para no despegarlo. Sobre la iluminación artificial, Caivinagua dice que no siempre es conveniente para resaltar este recubrimiento. No es buena cuando la opción escogida es reflectiva y puede generar brillos innecesarios, pero si es conveniente cuando el papel es mate.
Otra característica de este material: los papeles de colores enteros tienen menos desperdicios que los de figuras porque hay que hacer coincidir.
La decoración puede ser completada con candelabros, muebles tallados con tapices de colores de moda, cortinas, elementos de cristal y alfombras con mayor textura… USD 20 puede costar el metro de papel, pero hay más costosos por su textura y calidad.
10 metros longitud por 50 ó 60 centímetros de ancho tienen los rollos de este papel.