Este accesorio es muy resistente al alto tráfico. Foto: EL COMERCIO
La ecología es una preocupación real para los materiales y acabados para la construcción actuales. Y quienes los fabrican buscan crear innovaciones que ayuden a lograr ese fin.
Los flexómetros -premium y empotrados– de Briggs ingresan en esta categoría ecológica.
Sirven para urinarios e inodoros, permiten una descarga automática y un buen ahorro de agua.
Son elaborados en latón rojo, un material más resistente y duro que el cobre e ideal para el alto tráfico.
En los empleados para urinarios, el consumo de agua es de 1,2 litros por descarga.
Poseen una pila interna de 9 voltios, con lo cual la duración de la batería llega a
200 000 y 250 000 ciclos.
Los premium para inodoros incluyen un botón para descarga manual, permiten un consumo de 6 litros por descarga.
Si se usa por menos de un minuto dentro de la zona de alcance, se genera una media descarga de 3 litros. Si no, se realiza una automática cada 24 horas, explica Bertha Bustos, gerenta de Marketing de Edesa.