Las terrazas ecológicas son una de las características de este complejo. Las paredes interiores también tienen jardines hidropónicos
Phoenix Valley se emplaza en
este distrito de Changzhou,
China. Es sustentable y utilitario.
Los proyectos arquitectónicos contemporáneos marcan una clara tendencia: fusionan la ecología con la tecnología constructiva más avanzada con un objetivo claro: buscar la mayor sustentabilidad posible; es decir, volverse lo más autoproductivos, ahorradores y menos contaminantes.
El Phoenix Valley, un complejo híbrido de 65 000 m² levantado en el distrito Wujin de Changzhou, Jiangsu, China, es el ejemplo más acabado de esa amalgama de estilos, sistemas constructivos y tendencias.
Inaugurado a finales del año pasado, este gran emprendimiento se ha convertido rápidamente en un nuevo ícono urbano y en un centro de desarrollo de primera categoría de la floreciente metrópoli china de Changzhou, según explica https://www.archdaily.com.
Diseñado por el taller de arquitectura Studio 505 (cuya sede principal está en Melbourne, Australia) y construido por Shanghai Construction Group, este megaproyecto es manejado por el Gobierno Popular del distrito de Wujin. Su propuesta arquitectónica fusiona cines, un teatro, un centro comercial y un centro de arte.
La nueva edificación nació en el 2009, cuando el Poder Popular del Distrito Wujin llamó a un concurso público de diseño. Las especificaciones exigían una construcción con una estricta zonificación que considere un gran canal axial existente en la zona, según cuenta la website de Studio 505 (www.studio505.com.au).
El proyecto de Studio 505 rompió esa zonificación y propuso un proyecto en el cual el canal es envuelto por los diferentes bloques, los que simulan una serie de montañas, tanto por sus volúmenes como por sus techados, cubiertos de vegetación endémica.
Estas construcciones, asimismo, están ubicadas alrededor de un patio central, también ecológico, que además de generar la interacción ciudadana sirve de conexión con el espacio público y con todas las instalaciones del complejo.
Las paredes internas de los bloques construidos son, también, verdes, cubiertas con jardines del tipo hidropónico (no necesitan mucha agua).
Este sistema ecológico proporciona beneficios significativos en términos de aislamiento acústico, protección de las filtraciones y reducción del efecto ‘isla de calor’, que nace de la recolección del agua.
El Phoenix Valley consta de una serie de bloques operados de manera independiente, pero integrados a un gran control digital central. Este regula los programas de cuatro salas de cine con sistemas 3D; un gran teatro con capacidad para 1 000 personas, habilitado para ofrecer tanto funciones de ópera china tradicional como presentaciones de los grupos digitales más radicales y de vanguardia.
También posee una galería de arte flexible de cinco pisos; un palacio de la juventud (centro de aprendizaje) para educar a 4 000 estudiantes; una sala de ocupación múltiple y otra para deportes y danza; un pequeño ‘shopping’ de venta al por menor; una cafetería y restaurantes; un parque infantil, un patio ajardinado y la conexión virtual por medio de una pantalla LED de gran formato.
El proyecto es integral. Studio 505 incorporó tecnologías, condicionantes y procesos de diseño desarrollados y probados en un edificio mucho más pequeño, en Melbourne.
Esto comprende la tecnología ‘Green Roof’, equipamientos fotovoltaicos (BIPV) y matrices de energía solar térmica, ventilación natural, iluminación LED y sofisticados sistemas de gestión del agua, que incluyen intercambiadores térmicos con las aguas del canal que fluye a través y debajo del proyecto.
Con estos alcances, el complejo logró la certificación china 3 estrellas, que es el equivalente a Greenstar 5/6 estrellas o la certificación sostenible ‘Leed Oro’, según Archdaily.
En síntesis, Phoenix Valley ha mejorado las comodidades de la población, aumentó la plusvalía de los bienes raíces colindantes y formó un centro de gran prestigio, premiado por la comunidad local.