‘El año del verano que nunca llegó’ es la nueva novela del escritor colombiano William Ospina. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
‘El año del verano que nunca llegó’, la nueva novela de William Ospina, ganador del Premio Rómulo Gallegos 2009, se presenta hoy, 14 de julio, a las 18:30, en Mr. Books, de Mall El Jardín. Con esta obra el escritor colombiano se desprende de su largo recorrido por la historia de la Amazonía que le valió un trilogía que incluye ‘Ursúa’, ‘El País de la canela’ y ‘La serpiente sin ojos’.
En su nueva novela, Ospina hurga más hondo en su pasado narrativo y vuelve al Romanticismo. Sentado en el hall de un hotel en el norte de Quito, recuerda que hace 20 años escribió un libro que titula ‘Es tarde para el hombre’, en esta obra está el ensayo ‘Los románticos y el futuro’, en el que resalta la importancia del romanticismo no solo como vestigio de un tiempo pasado, sino como promesas de cosas que todavía podrían ocurrir en el mundo.
Sin embargo, ‘El año del verano que nunca llegó’ también marca un comienzo en su narrativa. Es la primera vez que, este escritor colombiano nacido en 1954, aparece como uno de los personajes en una de sus novelas. Con un entramado narrativo tan copioso, él se instala como el centro de gravedad de todas las historias y personajes que transitan por su libro.
La obra de Ospina inicia con la narración de la erupción del volcán indonesio Tambora en 1815. Una catástrofe natural, que un año más tarde, cambiaría el paisaje de toda Europa incluido el de Ginebra (Suiza) donde coincidieron, por unos días, Lord Byron, John William Polidori, Bysshe Shelley, la condesa Potocka, Matthew Lewis y Mary Shelley.
Ospina se sumerge en aquellos días en Villa Diodati y en la vida de estos escritores románticos, a través de un profundo trabajo de investigación, para descubrir los orígenes de ‘El Vampiro’, la obra que dio vida al afamado libro de Bram Stoker y a ‘Frankenstein’, la novela de la escritora Mary Shelley.
‘El año del verano que nunca llegó’ es un libro donde la historia juega un papel importante. Ospina señala que en su obra hay un diálogo entre los hechos y su propia interpretación de los acontecimientos, sumados a su imaginación. “Estoy convencido -dice- que la historia no es mucha si no se la enriquece con la imaginación”.
El tema que transita toda la obra de Ospina es la creación literaria de ‘El Vampiro’ y ‘Frankenstein’. Para este escritor y ensayista hay monstruos físicos que se dividen entre los bellos como los de la mitología griega, y los otros que son más de nuestra época y que llamamos deformes. Pero hay otro tipo de monstruos que lo inquietan, esos que no son fruto de la imaginación sino la acción del hombre.
Después de esta novela, Ospina quiere hurgar en los viajes que hizo Alexander von Humboldt por Latinoamérica, como siempre aprovechará su estancia en hoteles y aeropuertos para seguir investigando sobre detalles históricos y nexos literarios que seguro, luego, se convertirán en una novela para leerla de un solo tirón.