Los vidrios reflectivos son lo más llamativo cuando se observa al Hotel Cicame, ubicado en el centro de la Joya de los Sachas, cantón de Orellana.
Desde las habitaciones, quienes se hospedan contemplan la imagen de la ciudad. Su vista permite observar a los negocios que se levantan junto al hotel. Además de tener una imagen privilegiada del cielo y selva de la zona.
El edificio se pensó y construyó para la comodidad del huésped que es trabajador petrolero. La muestra de que el hotel se hizo para descansar y, a la vez, para trabajar son sus amplias habitaciones.
El Hotel Cicame tiene tres tipos de alcobas: matrimoniales, simples, dobles y triples. Las primeras tienen una cama de dos plazas, peinadora, baño privado, clóset. Además de tener una línea telefónica sobre un velador.
Junto al clóset se creó un espacio donde el trabajador puede realizar sus labores. Una lámpara complementa el escritorio, cuya amplitud da la posibilidad de ubicar una laptop. Otra de las comodidades que ofrece el hotel es su rápida conexión a Internet.
Todos los muebles son hechos de laurel de la zona. Se pensó en dos tipos de diseños: el lineal y el decorado. La cama es una muestra del primer tipo de diseño, muy solicitado en los muebles minimalistas de vanguardia.
Mientras que las peinadoras o los clósets tiene diseños más elaborados y clásicos. En sí, la habitación combina los diseños para complacer tanto a las personas con gustos tradicionales como a quienes aman la modernidad.
Para el relax, los pasillos del hotel Cicame combinan el azul de la luz con el blanco de las paredes. “La idea es dar un al cliente, desde el instante en que ingresa a su cuarto, la sensación de descanso y tranquilidad”, detalla Santiago León, gerente del hotel.
En cuanto a los techos, estos son de gypsum en un 90% . Los decorados se observan en las cenefas hechas de este material.
León también explica que el proyecto complementario del hotel contempla la culminación de otras 22 habitaciones. Actualmente ofrece 11 alcobas con capacidad para 20 personas.
Solo dos pisos funcionan actualmente. En la planta baja se ubica el restaurante, donde se ofrece comida nacional e internacional.
El parqueadero tiene una capacidad para 12 autos y para las motos, muy usadas en la zona.