The Smile fue emplazado en el Colegio de Arte de Chelsea Rootstein Hopkins Parade Ground. Se lo colocó durante el London Design Festival. Fotos: Plataforma Arquitectura
La arena para la construcción se agota. El Ministerio de Construcción de Vietnam, por ejemplo, informó que la demanda interna excede las reservas y que de existir ese desajuste, la arena para esa industria se acabaría en el 2020.
Conscientes de esa realidad, arquitectos alrededor del mundo dan oportunidad a otros materiales.
Uno de esos es la madera laminada cruzada (CLT). Se trata de un material que se destaca por su resistencia, apariencia y versatilidad. También seduce por su sostenibilidad, pues se trata de un recurso renovable (generalmente reforestación), que no requiere la quema de combustibles fósiles durante su producción.
La Cabaña de madera está en Ladysmith, Canadá.
Inicialmente se la utilizó para fabricar piezas de infraestructura, soportes en grandes obras de construcción e incluso bases para tractores en terrenos inestables.
Su potencial para construcciones pequeñas se debe ahora a su aspecto interesante y resistencia estructural. Actualmente, incluso hay rascacielos construidos con CLT.
Los paneles pueden funcionar como paredes, pisos, muebles, revestimientos y techos, y su grosor y longitud pueden adaptarse a las demandas de cada proyecto.
Una muestra de su versatilidad se observa en la selección de casas elaboradas con ese material, que hizo Plataforma Arquitectura.
Una de esas se llama CLT. Es una vivienda unifamiliar modesta para una familia de cuatro personas en Seattle, situada en un lote triangular pequeño de aproximadamente 230 m².
La Casa CLT fue construida en Seattle, Washington.
La materialidad de la casa recuerda pequeñas cabañas de playa del noroeste del Pacífico, así como detalles del lugar, que una vez fue una playa bajo tres metros de agua en 1916.
La vivienda explora el diálogo entre una madera ennegrecida exterior, que se abre a un interior de madera cruzada-laminada blanqueada, completamente cruda.
La Cabaña de madera laminada, en cambio, está en Ladysmith, Canadá.
Con el fin de minimizar el costo de los trabajadores en obra y garantizar la más alta calidad de construcción, los propietarios se inclinaron desde el principio por el uso de piezas prefabricadas. Específicamente, el material seleccionado fue CLT, que puede ser fabricado en paneles tan grandes como 18 por 3 m, aproximadamente.
Minimod Catucaba, en São Paulo, Brasil, pretende, con el uso de madera laminada cruzada, ser una alternativa a la construcción tradicional, incorporando todas las ventajas que la industria puede brindar: mayor precisión, mayor rapidez, menor cantidad de generación de desperdicios y, sobre todo, una mayor responsabilidad ambiental.
Minimod conjuga la eficiencia del producto con nuevas tecnologías.