El ‘Sumak Kawsay’ ¡encarcelado!
“Meter a alguien en la prisión, privarle de alimento, de calor, impedirle salir, etc... Ahí tenemos la manifestación de poder más delirante que uno pueda imaginar... Por una vez el poder no se oculta, no se enmascara, se muestra como feroz tiranía en los más ínfimos detalles, cínicamente...”. (Michel Foucault). Asombra constatar por estos días revolucionarios la sombra carcelaria por doquier: Por sospecha de atentar contra el Estado soberano, a la cárcel. Perjuicio económico al Fisco, o algo parecido a la cárcel...de “los más buscados” ni hablar. Cabe preguntarse: ¿Aprenderá más Medicina el médico encarcelado por mala práctica? Será que a la sombra se asimilan correctos procedimientos sanitarios?; ¿el ‘velocista’ que cayó preso aprenderá a conducir con más responsabilidad a la sombra?; ¿el ‘choro’ dejará de delinquir detenido en “la escuela del delito con niveles de maestría internacional”?
Ya los países más civilizados (no digo los más ‘adelantados’) consideran la desaparición del sistema carcelario por cruel, represivo, y sobre todo ¡Ineficaz! ¿Será que no existe mismo una ‘pedagogía estatal’ más acorde con el socialismo del siglo XXI que dizque vivimos ? ¿Será que así lograremos alcanzar el ‘Sumak Kawsay’? Tiene sentido medio Ecuador tras las rejas? Qué pena que nuestros políticos no hayan leído a Foucault, un filósofo francés renovador y humano... ni siquiera a Dostoievski, que señaló con acierto a su vez: “Conociendo su sistema carcelario se puede conocer el grado de civilización de un pueblo... o de salvajismo...”.