Al Alcalde de Pedernales

Estimado Sr. Alcalde: tuve el agrado de visitar Pedernales por segunda vez, llevándome una grata sorpresa. Lo encontré más limpio, mejor organizado, nuevo malecón, conductores de taximotos contentos con los cambios, restaurantes con variedad de comida, playa preciosa, bailoterapia en las noches, oferta hotelera para todos los gustos.

Pero todo esto contrasta con los perritos callejeros, en especial los que deambulan por la playa. Son esqueletos vivientes a los que les cuesta ponerse de pie por la desnutrición y deshidratación.

Nadie se conduele con ellos, nadie los cuida, nadie les brinda comida y peor agua dulce para calmar su sed. Están enfermos, con gusaneras en el lomo.

Al ofrecerles un poco de comida y agua nos regresaban a ver con ojos de agradecimiento que nos arrancaron lágrimas.
Por favor, retírelos de la playa, salve a los que tienen posibilidad de una mejor vida porque se mueren de hambre y de sed y a nadie le importa.  

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