Los doce chimbadores

Todos los seres humanos tenemos ambiciones y deseos de superación.

Pero realmente uno tiene que pensar racionalmente y ser realista cuando hace algo en su vida.

Con gran ambición, cálculo político y haciendo realidad el divide y vencerás, hicieron el juego a un grupúsculo político, tuvimos la desbandada de 16 candidatos a la Presidencia, de un pequeño país, en tamaño.

No es justo que con esa mala dada Ley de la Democracia, permita que participe cualquier persona, al más alto puesto público del país.

Muchos de estos candidatos y no solo a la Presidencia, sino también a la Asamblea, no tienen sangre en la cara y les falta por mucho tener la capacidad intelectual y moral para ocupar tan altas dignidades.

Por favor reformemos esa malahada ley, pensemos por una sola vez en el bienestar y desarrollo del país y no en intereses personales, que siguen sumiendo en el subdesarrollo y debacle moral a nuestro hermoso país.

Solo me remito a los resultados, reales y fehacientes de esta última elección. Justo por este desprestigio de la casta política y trabas en la ley, gente muy valiosa, no participa en nada de este fiasco de política. Hasta cuando les toleramos.