Allí está, esperando, la construcción del Hospital de Cayambe. Ofrecieron lo que no cumplieron, causa indignación que la palabra de honor ahora no tenga validez. Es tan fácil ofrecer y tan complicado cumplir. El pueblo se siente burlado, ¿Qué les pasa a los políticos y a los funcionarios?, ¿por qué nos mienten? No quiero pensar mal, no quiero enojarme.
Cuando el pueblo siente que le han defraudado, con indignación debe recurrir a lo que no quiere hacer, a protestar en las calles, debe decirles a los incumplidos que esto no es un juego. La primera piedra es la evidencia del engaño, si la piedra pudiera hablar, ¿qué nos diría?: -Si no van a cumplir lo que prometen, por favor, no me coloquen, no hagan fiesta, no me fotografíen.
El Comité pro construcción se está reuniendo para tomar las medidas que correspondan, y no permitirá que se mofen del pueblo. La primera piedra está allí olvidada por la desidia, es el síntoma de la indolencia. La primera piedra es la piedra en el zapato de quienes creen que tienen el derecho de mentirnos. Alguien dijo: “El pueblo juzga a través del voto lo bueno o lo malo que haces”.