Ética, liderazgo y pandemia

Este tiempo nos está mostrando de lo que de verdad estamos hechos. En unos casos, esto significa asumir nuevas responsabilidades y tomar decisiones disruptivas para nuestras vidas y en otros casos la urgencia de asumir el liderazgo en la toma de decisiones empresariales y comunitarias.

El liderazgo está siendo puesto a prueba, desde el punto de vista económico (porque la violencia económica, conocida comúnmente dentro de las familias, sí se ha manifestado corporativamente también) y desde el punto de vista humano, donde las cabezas de las organizaciones han debido accionar en poco tiempo, definiendo públicamente si quien está en el centro de su ejercer es la comunidad (empleados, clientes y entorno humano) o sus cuentas bancarias.

La responsabilidad familiar corporativa está teniendo un despertar en algunas (muy pocas) empresas del país, y espero que poco a poco se pueda fomentar una auténtica cultura donde se comprenda que el verdadero y sostenible beneficio integral, se logra cuando lo que hacemos trasciende y beneficia lo que amamos. Las empresas deberán invertir más que dinero, tiempo y oídos a sus colaboradores, para hacer de su trabajo, su pasión y poder superar esta prueba como un equipo.