La cultura metro, un modelo de comportamiento propositivo, se basa en valores como la empatía y la responsabilidad. Así lo explicó Micaela Alarcón, guía educativa del Metro de Quito, en La PizarraEC, el lugar donde las ideas se ponen en acción.
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Este enfoque de Metro de Quito, explica Micaela, busca garantizar los derechos de los usuarios y mejorar la calidad del servicio.
La implementación del sistema de Metro en Quito desde diciembre ha planteado el desafío de consolidar una cultura de convivencia y respeto entre los usuarios. Más allá de simplemente ofrecer un medio de transporte eficiente, el metro busca fomentar una actitud proactiva y colaborativa entre los ciudadanos.
Empatía mueve a la cultura Metro
En este contexto, Micaela dice que la empatía se erige como un valor fundamental. “Los usuarios deben reconocer las necesidades de los demás y actuar en consecuencia, especialmente en situaciones que involucren a personas con discapacidad o adultos mayores”. La cultura metro se esfuerza por crear un ambiente inclusivo y solidario donde todos puedan desplazarse con dignidad y seguridad.
El compromiso con la responsabilidad individual y colectiva también es clave, para Micaela. Los usuarios deben cumplir con las normas establecidas para asegurar un viaje seguro y confortable para todos. Desde respetar los asientos reservados hasta evitar obstruir las puertas del tren, cada acción contribuye al bienestar común y al funcionamiento eficiente del sistema.
La educación y la comunicación desempeñan un papel crucial en la promoción de esta cultura. Los guías educativos del Metro trabajan no solo para informar a los usuarios sobre las normas y los servicios disponibles, sino también para educarlos sobre la importancia de respetar los derechos de los demás y cuidar el entorno compartido.