Las visitas al Refugio de Vida Silvestre Manglares Estuario del Río Esmeraldas están autorizadas por el Ministerio del Ambiente. Fotos: Cortesía/Oscar Zambrano.
Las visitas al manglar y el avistamiento de aves fueron autorizados en el Refugio de Vida Silvestre Manglares Estuario del Río Esmeraldas.
Este sitio, cerrado por cinco meses debido a la pandemia, está dentro de la ciudad de Esmeraldas y es el hábitat de muchas especies de aves, peces, reptiles y cuatro variedades de manglar, que pueden observarse mientras se navega por el interior del área de reserva.
La responsable del área y funcionaria del Ministerio del Ambiente en Esmeraldas, Esther Palomino, explicó que quienes deseen ingresar deben contar con una autorización de la Dirección del Ambiente.
En la ciudad está autorizada una operadora turística que cuenta con permisos para realizar los paseos y el avistamiento de al menos 34 especiales de aves que anidan en el manglar, en su mayoría, migrantes por temporadas.
El único puerto de embarque para los aventureros es la parroquia Tachina, muy cerca del aeropuerto Carlos Concha, desde donde se observa el área de mangle verde.
La responsable del área protegida explicó que los recorridos por ahora solo se realizan de martes a domingo, de 08:00 a 12:00, pero después se ampliará hasta las 17:00.
La reserva está custodiada por guardaparques, que mantienen un programa de cuidado del manglar con las familias que habitan junto a la reserva. Además, hay guías del Ministerio del Ambiente que explican sobre la riqueza natural de las 242 hectáreas del refugio.
Gorky Vaca, uno de los promotores turísticos de Tachina, explica que por el río se observan especies de aves como el águila pescadora, gavilán variable, garceta, garrapatero de montaña, garza blanca, garceta azul, pelícano pardo, cormorán neotropical, gaviota real, martín pescador, entre otros.
Esta reserva tiene 12 años de creación y desde entonces se realiza un proceso de concientización con las personas de los alrededores, para que conserven las especies que ahí viven.