Zeus, un pitbull de 9 meses, murió tras recibir cuatro mordidas de una serpiente coral que estaba en el jardín de la casa de su familia. Foto: captura.
Zeus será siempre un héroe para su familia. El perro de raza pitbull de solo nueve meses no dudó en enfrentarse a una serpiente venenosa para defender a dos de los cuatro hijos de Gina y Gary Richardson, que desde pasado 23 de septiembre del 2019 lloran la muerte del can.
Según informa la cadena CNN, Oriley Richardson de 10 años estaba jugando en el jardín de su casa cuando repentinamente Zeus saltó hacia él. El niño notó que el can atacó a algo que estaba en el piso, pero pensó que se trataba de una cuerda.
Tiempo después, la familia notó que Zeus evitó que una serpiente coral ataque no solo a Oriley, sino también a Orion de 11 años quien había salido al jardín a cambiar el agua del can.
La serpiente coral, según explica National Geographic, es una de las más venenosas de mundo. “Es pariente de la cobra, la mamba y la serpiente marina. Vive en los bosques, arenales y pantanos del sudeste de Estados Unidos y pasa la mayor parte de su vida bajo tierra o entre montones de hojarasca“. Los ataques de este reptil a los humanos, dice el medio, son poco comunes. “Solo muerde si la pisan o tratan de cogerla”.
Para evitar que la venenosa serpiente ataque a los niños, Zeus utilizó todo el peso de su cuerpo y se recostó sobre el reptil. El can logró morder la cabeza de la coral y finalmente matarla, pero en el proceso recibió cuatro mordidas de la misma que resultaron ser mortales.
Oriley, de 10 años, junto a su madre Gina Richardson y a Zeus a los pocos meses de nacido. Foto: captura.
La familia tomó a su mascota y la llevó a un veterinario cercano. Al llegar, los médicos le administraron un antídoto, pero era demasiado tarde para el can que murió al día siguiente de los hechos. Su deceso coincidió con el cumpleaños de Oriley.
Toda la familia Richardson, incluyendo a Sega, la madre de Zeus, acudió al hospital veterinario para despedirse de su valiente mascota. Gina Richardson, madre de los pequeños, contó que Sega se acercó a su cachorro y colocó una de sus patas sobre la mesa en la que yacía su cuerpo sin vida, entonces hizo un sonido parecido a un sollozo.
“Sus orejas se movieron, se bajó de donde estaba, vino al sillón en el que yo me encontraba y puso su cabeza en mis piernas visiblemente afligida. En ese momento, no solo mi familia estaba destruida, su madre también lo estaba, dijo Gina a CNN.
La madre aseguró que estará eternamente agradecida con Zeus por su heroico acto. “Siento que hubiera perdido a uno de mis hijos si él no hubiese estado ahí”, añadió.
Para el pequeño Oriley la pérdida de Zeus ha sido especialmente dolorosa. “Él era un buen chico y yo lo amaba con todo mi corazón”, declaró. “Jugaba siempre con él. Me siento triste y lo extraño”.
Por su parte, Gary Richardson, el padre de los niños, dijo que Zeus era su “mejor amigo” y que espera que la noble acción del perro sirva para cambiar la percepción de la sociedad sobre los pitbull.