En la actualidad existen varios tipos de paneles fotovoltaicos para transformar la energía solar en otras energías, especialmente calórica.
Bosch acaba de presentar otro modelo, llamado de termosifón.
El termosifón es un sistema integrado muy simple, con panel y acumulador de agua incorporado, informa Cristina Cobo.
Este es un sistema que no requiere de bomba ni de central de control. Eso se logra por el efecto gravitacional generado por las diferencias de temperatura, que hacen circular en forma natural el líquido caloportador. Este fluido permite transmitir el calor al acumulador, no se congela y recorre el sistema sin estar nunca en contacto directo con el agua.
Es como un circuito cerrado: el calentamiento de agua se genera por transferencia de calor en el termotanque. El agua para uso doméstico no pasa por el sistema cerrado, así se evita la corrosión, la- formación de sarro y, asimismo, se alarga la vida útil.