Hasta el momento hay dos procesados por la muerte de la abogada María Belén Bernal. El primero es un teniente de Policía y esposo de la víctima. Él es considerado el principal sospechoso de su muerte.
La segunda es una cadete de la Escuela Superior de Policía. Precisamente en ese centro de formación policial, Bernal fue vista por última vez con vida, el 11 de septiembre del 2022. Después de estar 11 días desaparecida, su cuerpo fue encontrado en el cerro Casitagua, cerca de ese recinto policial.
¿Cuál es la situación judicial de cada procesado?
El esposo de Bernal pasó de ser un instructor de cadetes en la Escuela Superior de Policía a ser considerado el principal sospechoso de la muerte de la abogada de 34 años de edad.
Él está prófugo de la justicia y la Policía armó un bloque de búsqueda para capturarlo. De hecho, su rostro encabeza la lista de Los Más Buscados del país por cometer violencia de género.
La Policía y Ministerio del Interior ofrecen una recompensa de USD 20 000 a quien proporcione información real sobre su paradero.
Pese a estar prófugo, la Fiscalía lo procesó por el presunto delito de femicidio, el cual tiene una pena de hasta 26 años de cárcel.
La Fiscalía lo señaló como autor de ese delito durante una audiencia que se desarrolló, en la Casa de Justicia de Carcelén de Quito, el 23 de septiembre del 2022.
La jueza Catalina Sánchez también le dictó prisión preventiva. En esa diligencia, el fiscal del caso detalló principalmente tres evidencias para fundamentar la imputación penal.
La primera fue un informe del levantamiento del cuerpo de Bernal, en el cerro Casitagua. La segunda evidencia fue una pericia para comprobar que las huellas del cadáver correspondan a la víctima y la tercera fue la autopsia, que determinó que la mujer murió por estrangulamiento y asfixia.
Antes de huir, el sospechoso dio su versión en Fiscalía. Allí dijo que el 11 de septiembre tuvo una discusión con su esposa y que por eso ella cogió un taxi en la avenida Simón Bolívar y desde entonces desconoce su paradero.
La cadete
El 16 de septiembre del 2022, la estudiante de la Escuela Superior de Policía fue detenida con fines investigativos. Su aprehensión ocurrió durante el allanamiento de las instalaciones del pelotón femenino de la escuela de formación.
Tras analizar los indicios, la Fiscalía decidió formularle cargos por presunta desaparición involuntaria. Luego, durante una audiencia en la Unidad de Flagrancia, la jueza Paulina Sarzosa ordenó la prisión preventiva en contra de la cadete, de 24 años.
Sin embargo, la situación jurídica de la cadete cambió cuando apareció el cuerpo de Bernal en el cerro Casitagua. Por eso, ahora se la investiga por el delito de femicidio.
De hecho, en la audiencia del 23 de septiembre del 2022, la Fiscalía le reformuló cargos por ese delito y también la jueza le ratificó la prisión preventiva.
Además, ayer (26 de septiembre del 2022), la cadete desistió de la acción de habeas corpus, que había interpuesto inicialmente uno de sus abogados. El objetivo era que ella pueda salir de la cárcel de mujeres de Quito, donde está recluida.
Todo ocurrió por diferencias de criterios entre los dos abogados que la representaban. Mientras uno de ellos dijo que el habeas corpus era el camino para obtener la libertad de la joven, el otro jurista proponía otras opciones para que ella pueda dejar la cárcel. Al final, la procesada decidió desistir del habeas corpus.
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