El gris cenizo que dejó los miles de objetos de plástico y caucho consumidos por el fuego, cubre sobre todo la parte superior del edificio de dos pisos. Foto: Gabriel Proaño/ EL COMERCIO.
Luego de que el incendio ocurrido el 8 de julio del 2015 en el centro comercial ‘Bahía Mall 3’ se reactivara por al menos tres ocasiones, el panorama del sitio luce desconcertante la mañana del jueves 9 de julio.
El gris cenizo que dejó los miles de objetos de plástico y caucho consumidos por al menos tres horas de intenso fuego, cubre sobre todo la parte superior del edificio de dos pisos. Allí funcionaban las bodegas de mercadería originaria de China que se comercializan en almacenes aledaños.
En la acera de la calle Chiriboga hay objetos caídos que progresivamente son retirados por personal de limpieza. “Los pocos que no se quemaron, quedaron inutilizables”, comentan testigos.
Hasta el sitio se transportó un equipo de Criminalística de la Policía, que deberá confirmar si el incendio se produjo o no por un cortocircuito como hasta el momento se conoce. Ayer, un uniformado del Cuerpo de Bomberos dijo que habían cables muy cercanos al techo del centro comercial donde se produjo el hecho.
El gobernador del Guayas, Julio César Quiñónez, se pronunció sobre este hecho, y dijo que las bodegas de este centro comercial no contaban con una estructura adecuada para almacenar objetos de material inflamable. Dijo también que existe irresponsabilidad de sus propietarios, por lo que a partir de ahora harán continuos operativos de control interno.
Los moradores de este sector de la Bahía de Guayaquil, pedían que los bomberos continúen refrescando el edificio. A ellos en cambio se les pidió que cierren las ventanas de los departamentos cercanos para evitar algún tipo de propagación.
En tanto, algunos comerciantes de nacionalidad china observaban de lejos los trabajos de seguridad. Uno de ellos miraba preocupado los objetos tirados que habían importado hace tan solo tres semanas, según expuso una trabajadora ecuatoriana.
Las pérdidas económicas son incalculables hasta el momento. Lo que se conoce es que cinco locales se vieron afectados directamente por las llamas desplegadas desde las 09H00 de ayer. Otros trabajadores de los almacenes de ropa ubicados a espalda de este centro comercial, debieron trasladar la mercadería hasta otras tiendas donde el calor no las alcance.
En cuanto a daños humanos, se corroboró que no existió pérdidas humanas durante el evento de ayer. Quienes necesitaron atención médica fueron 30 bomberos luego de padecer fatiga. Uno de ellos habría inhalado excesivo humo.