Un semáforo peatonal no es una garantía para el cruce seguro de los transeúntes. Esa fue la conclusión a la que Dennis Berrones llegó cuando intentaba cruzar el semáforo de la av. Maldonado, frente a la parada Pujilí del Corredor Sur Oriental.
En 20 minutos, el pasado martes, nueve vehículos no se detuvieron frente a la luz roja del semáforo. Siete fueron unidades de transporte público y otros dos, vehículos pesados. En el sector no hubo control policial. Berrones esperó que todos los autos se detuvieran para cruzar.
El 73% de las muertes por accidentes de tránsito en el 2010 fueron por atropellamientos o arrollamientos, según datos del Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana. Esto significa que de las 381 personas fallecidas, 278 fueron peatones. Los accidentes de tránsito ocupan el primer lugar en las muertes por causas externas.
Juan Zapata, de la Dirección de Ingeniería de Tránsito de la Policía, asegura que la responsabilidad es compartida. De los 5 316 accidentes registrados en la Policía en el 2010, la imprudencia del peatón ocupa el cuarto lugar, con 532 accidentes.
Este tipo de accidentes también puede ocasionarse por la falta de una cultura de seguridad vial, el mal funcionamiento de las luces e incluso por fallas en la programación de los semáforos.
Eso se puede evidenciar en la esquina de las calles Antonio de Ulloa y Alonso de Mercadillo, en el sector de Santa Clara. Para Verónica Logroño y Patricia de Ramírez cruzar la Ulloa (vía en sentido sur-norte) utilizando el semáforo peatonal es imposible.
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La luz de los semáforos que hay en esa intersección permite la circulación de vehículos y peatones al mismo tiempo. Las transeúntes tienen que estar atentas a la luz roja del semáforo vehicular y esperar que todos los conductores se detengan para cruzar. “Ese aparato está así desde hace unos dos meses y nadie lo arregla. En vez de ayudar a los peatones, se convirtió en un arma peligrosa”.
Otro problema es el desconocimiento de las normas que regulan la movilidad en una intersección. Según el artículo 202 del reglamento de la Ley de Tránsito, los peatones que hayan iniciado el cruce de la calle por las zonas de seguridad tendrán preferencia sobre los conductores. Eso se conoce como el derecho de vía.
Pero esta norma no se respeta en la intersección de las avs. Patria y Amazonas. Aunque la luz del semáforo peatonal estaba en verde, Blanca Paredes tuvo que correr cuando vio que un chofer casi no se detuvo cuando giró a la derecha desde la Amazonas hacia la Patria. Patricia Guevara, otra transeúnte, dice que el apuro de los choferes no justifica el irrespeto a los peatones. Ella se siente más segura cuando cruza la avenida junto con otras personas.
Para Daniel Tenorio, el irrespeto a las señales de tránsito no es un problema del tipo de conductores. “El irrespeto se ve en choferes de buses, taxis, motos y particulares”. En la av. Teniente Ortiz, frente a la parada Ajaví del trolebús, las luces de los semáforos peatonales están opacas y casi no se ven. Las luces de los cuatro vehículos son suficientemente claras, pero eso no impide que algunos choferes no se detengan en el cruce.
En el 2010, la Policía de Tránsito emitió 43 741 contravenciones por irrespetar las señales de tránsito, incluyendo los semáforos. Esa infracción es sancionada con USD 78 y seis puntos menos en la licencia de conducir.
La normativa
Según el reglamento de la Ley Orgánica de Tránsito, el peatón tiene derecho a continuar con el cruce de vía una vez que este se haya iniciado aún cuando la luz verde del semáforo haya cambiado.
En caso de que tanto el conductor como el peatón tengan derecho de vía en una intersección o cuando el auto vaya a girar hacia la derecha o la izquierda, el peatón tiene el derecho de paso.
El peatón debe abstenerse de cruzar la calle en forma diagonal o de manera intempestiva. Debe respetar las señales de los semáforos y hacer buen uso de los pasos cebra. La Policía tiene la obligación de ayudar en los cruces.