El homenaje se cumplió en la comunidad San Miguel de Quera, en la plaza histórica decorada con la imagen de Fernando Daquilema. Foto: Raúl Díaz para EL COMERCIO
Un emotivo evento para recordar a Fernando Daquilema, el protagonista de la primera sublevación indígena registrada en la historia, se cumplió el fin de semana en Cacha, una parroquia de Riobamba. Cerca de 500 personas se congregaron en la plaza histórica de la comunidad San Miguel de Quera para homenajear la memoria de quien consideran un héroe indígena.
El evento se inició con un acto cívico. Las autoridades de la provincia y de la ciudad llegaron en un desfile hasta San Miguel de Quera, comunidad natal de Daquilema. Lo hicieron portando ofrendas florales que luego dejaron en el monumento que se edificó el año pasado en el centro del poblado.
“Daquilema murió en 1871, lo ejecutaron un 7 de abril, durante el gobierno de García Moreno, acusado de promover la rebeldía en las comunidades indígenas. Han tenido que pasar 147 años para que la historia de nuestro héroe sea conocida a nivel nacional y su memoria de reivindique con un homenaje”, dijo Antonio Toabanda, un comunero.
En San Miguel de Quera y en las demás comunidades de Cacha la hazaña de Fernando Daquilema se conservó en la memoria oral. “Aquí nunca lo hemos olvidado, desde que somos pequeños los abuelos nos cuentan que somos descendientes de antepasados rebeldes”, dice Toabanda.
Según una investigación que realizó el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural en base a documentos históricos y testimonios de la gente, Fernando Daquilema solo tenía 23 años cuando lideró la revuelta.
Técnicos de esa entidad entregaron el año pasado a la comunidad 77 documentos originales sobre el levantamiento en contra de la explotación y otros que detallan la vida de Daquilema. Además, dos fotografías originales.
Esos documentos, además del resultado de nuevas investigaciones, se comentaron en un conversatorio sobre la vida de Daquilema, que también fue parte del homenaje. Historiadores de la Universidad Nacional de Chimborazo e investigadores hablaron sobre el legado del líder indígena.
“Es muy importante hablar sobre el rol de los jóvenes y su relación con la memoria de Daquilema. Ellos deben comprender que además de este homenaje, lo que se necesita es que ellos sigan su ejemplo y se esfuercen por el progreso de las comunidades”, dijo José Parco, promotor del evento.
El homenaje concluyó con la presentación de la Banda Rítmica de la Unidad Educativa Intercultural Monseñor Leonidas Proaño. Los jóvenes desfilaron por las calles de la comunidad y concluyeron su presentación en una tarima que se instaló en la plaza.
En ese escenario se presentó también el Ensamble Sinfónico del Municipio de Riobamba, y el coro femenino Las Voces Kichwa, integrado por mujeres de varias edades, oriundas de 19 comunidades indígenas de Riobamba.