Fidel, el french poodle considerado como 'peligroso', deberá empezar terapia de comportamiento

La Agencia Metropolitana de Control aclaró este 13 de agosto del 2019 que Fidel, un perro que en el 2016 no pasó pruebas de comportamiento a las que se le sometió tras morder a una persona, no será sacrificado. Foto: Facebook/ Cynthia Viteri.

La Agencia Metropolitana de Control aclaró este 13 de agosto del 2019 que Fidel, un perro que en el 2016 no pasó pruebas de comportamiento a las que se le sometió tras morder a una persona, no será sacrificado. Foto: Facebook/ Cynthia Viteri.

Los problemas de comportamiento de Fidel se originan en que es un perro muy humanizado, según Andrés Fierro, asesor del alcalde Jorge Yunda en temas de fauna urbana. Foto: Facebook/ Cynthia Viteri.

Fidel, considerado como un perro peligroso, deberá empezar una terapia conjunta con sus dueños. Este french poodle se hizo popular en redes sociales, cuando se empezó a compartir su caso con el fin de evitar que sea sometido a la eutanasia.

Tras una inspección realizada este miércoles 14 de agosto de 2019, las autoridades determinaron que el animal deberá someterse a terapia de comportamiento. En un mes y medio se le volverán a realizar las evaluaciones de temperamento.

Este perro fue acusado de morder a una vecina hace cuatro años. En ese momento se le realizaron las pruebas de carácter y fue catalogado como un can peligroso. La disposición en el 2016 fue que se lo someta a eutanasia, si no cambiaba de comportamiento.

A través del hashtag #salvemosafidel, los usuarios empezaron a pronunciarse en los últimos días en contra de esta decisión. Incluso, Cynthia Viteri, alcaldesa de Guayaquil, se refirió al caso en redes sociales y pidió al Alcalde de Quito, Jorge Yunda, que evite la muerte del animal.

La Agencia Metropolitana de Control (AMC) aclaró que no se pondrá en riesgo la vida de Fidel y que se darán recomendaciones sobre el manejo de este perro de siete años de edad. Andrés Fierro, asesor del Alcalde de Quito en temas de fauna urbana, dice que Fidel no es un perro agresivo, pero que se debe someter al tratamiento para mejorar su carácter y comportamiento.

Para Fierro, los principales factores que han influenciado en la actitud de Fidel se relacionan con que es un perro “demasiado humanizado” y dependiente de su dueña. Cuando alguien se acerca a su propietaria, este se pone a la defensiva. Al tratar a los canes como humanos, se puede potenciar este tipo de actitudes.

“Son cosas que si se pueden restablecer con terapia”, dice Fierro y aclara nuevamente que no se sacrificará a la mascota. En un mes y medio Fidel será evaluado en el centro canino y por un etólogo.

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