Científicos del centro de investigación español Barcelonaeta Brain Research Center (BBRC) de la Fundación Pasqual Maragall y del Hospital del Mar de Barcelona, validaron nueve biomarcadores para diagnosticar el alzhéimer en la práctica clínica diaria. Se hace a través de una muestra de sangre.
En el trabajo también participó la Universidad de Gotemburgo (Suecia). Dicho estudio comparó por primera vez la validez de estos nueve biomarcadores a partir de muestras de sangre de pacientes del Hospital del Mar con diversas patologías neurológicas, en las que han analizado la presencia de nueve variantes de la proteína Tau.
Según el neurólogo Marc Suárez-Calvet, algunos de estos marcadores en sangre son tan útiles para detectar alzhéimer, como los mismos determinados con la prueba de referencia utilizada hasta ahora: el análisis del líquido cefalorraquídeo obtenido por punción lumbar.
El neurólogo subrayó que las determinaciones de biomarcadores en plasma, menos invasivas que una punción lumbar, pueden permitir disponer de una herramienta para avanzar en el diagnóstico del alzhéimer. Y determinar qué personas deben someterse a más pruebas para confirmar el diagnóstico.
Un paso adelante
El trabajo, que publica la revista Alzheimers & Dementia, es, según sus autores, un nuevo paso para disponer de herramientas de diagnóstico precoz de esta enfermedad degenerativa.
Uno de los aspectos destacados del estudio es que se han estudiado a la vez y con las mismas muestras estos nueve posibles biomarcadores, todas variantes de la proteína Tau, en 197 personas con deterioro cognitivo, no solo alzhéimer. Son pacientes del Servicio de Neurología del Hospital del Mar.
“La conclusión es que realmente tenemos biomarcadores en sangre, que pueden ser muy útiles en el diagnóstico del alzhéimer en la práctica clínica diaria. Sin embargo, todavía no se puede incorporar en el día a día y no puede sustituir la prueba estándar, la punción lumbar y el análisis del líquido cefalorraquídeo”, admitió Suárez-Calvet, responsable del Grupo de Biomarcadores en Fluidos y Neurología Traslacional del Barcelona Beta Brain Research Center (BBRC).
Estos resultados también permitirán “mejorar el diagnóstico de los pacientes que tienen problemas cognitivos. Y escoger mejor a qué personas hacer la prueba de referencia, que sigue siendo la punción lumbar”, puntualizó.
Las muestras de los pacientes se enviaron a la Universidad de Gotemburgo (Suecia), donde se dividieron para su análisis en diferentes laboratorios, que desconocían la patología de cada enfermo. Esto ha permitido obtener unos resultados comparables.
En las personas afectadas de alzhéimer, los datos se compararon con los de sus muestras de líquido cefalorraquídeo obtenido por punción lumbar. Estas ratificaron que algunas de las medidas de la proteína Tau en sangre eran capaces de detectar la enfermedad con una precisión cercana a la punción lumbar.
Pruebas en primeros momentos
Por eso, dice el estudio, puede funcionar como marcador diagnóstico, incluso en los primeros momentos de la enfermedad.
“Por primera vez, hemos podido hacer un análisis comparativo de todos estos biomarcadores en sangre a la vez”, indicó la investigadora del BBRC Marta Mil-Alom.
Albert Puig-Pijoan, neurólogo del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), indicó que este estudio no desplazará la punción lumbar como prueba estándar para el diagnóstico del alzhéimer.
“A corto plazo, la punción lumbar seguirá siendo necesaria. Pero estos resultados nos abren la puerta a aplicar esta prueba en sangre, que es menos invasiva, para elegir mejor cuáles son los pacientes que deben someterse a una punción lumbar”.
Dijo además que la prueba puede diagnosticar alzhéimer “en pacientes a los que no podemos hacer una punción lumbar u otras pruebas con biomarcadores de más difícil acceso”.
El jefe del Servicio de Neurología del Hospital del Mar, Jaume Roquer, auguró que están “relativamente cerca de tener” un biomarcador en sangre positivo, que permita indicar una posibilidad de alzhéimer alta en personas con deterioro cognitivo demostrado por una adecuada valoración neuropsicológica.
Investigación
Por otra parte, científicos estadounidenses implementaron un nuevo programa de salud, que proporciona herramientas para evaluar con precisión el riesgo a que un paciente desarrolle alzhéimer u otras afecciones neurológicas. Así lo informó la Facultad de Medicina Miller de la Universidad de Miami (UM).
El programa denominado Brain Health Platform (Plataforma de Salud Cerebral), consiste en una serie de pruebas médicas para determinar el riesgo de padecer demencia de un paciente.
Esta plataforma combina dos tipos de índices, el de resiliencia (RI), vulnerabilidad (VI) y un sistema de codificación de números y símbolos (NSCT). La suma de estas métricas ayuda a “triangular el riesgo de un paciente de padecer la enfermedad alzhéimer”.