Su arma la dejó en la patrulla. Embutido en el traje de bioseguridad, William Yugzi entró apenas con un celular para hacer fotos a una inusual escena del crimen. El hombre que murió, infectado con coronavirus, quedó sentado, con un vaso de agua y galletas en las manos.
El paquete sospechoso con varios dispositivos en el interior fue hallada por dos personas que vieron “cables y tubos”. El paquete sospechoso estalló este lunes, 19 de septiembre del 2016, por la madrugada cuando robots de la brigada de explosivos intentaban desactivarlo. Video: Infobae
Las jóvenes recibieron capacitación teórica y práctica. Operarán en las vías de Quito.