El reto: poner orden en las finanzas públicas

La sostenibilidad de las finanzas públicas es un tema que debe interesar a los líderes políticos, empresariales y sociales, debido al impacto que el gasto del Gobierno tiene en múltiples sectores y que va desde la inversión pública hasta la entrega de bonos.

Si la política fiscal se vuelve insostenible, se corre el riesgo de que en el futuro se recorten las asignaciones a los gobiernos seccionales, se reduzca la inversión pública, se despida a empleados o se retrase el pago a proveedores y a la burocracia, como ha sucedido en meses pasados.

Los problemas de insostenibilidad fiscal se originaron en el gobierno anterior y se evidenciaron en altos déficit fiscales, que fueron cubiertos con un agresivo endeudamiento público, básicamente desde el 2014.

Este problema está lejos de resolverse, ya que la pandemia amplió la brecha entre ingresos y gastos y obligó a mantener el alto endeudamiento. El déficit del sector público llegó a USD 7 457 millones el año pasado y el Gobierno tuvo que financiarlo con créditos de los multilaterales.

El apoyo del Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial, BID, CAF y otros organismos internacionales será necesario este año, pero obligará a realizar reformas internas para sanear las finanzas públicas.

Una de ellas tiene que ver con la independencia del Banco Central, para evitar que los depósitos de la reserva monetaria -que son de los depositantes del sistema financiero- sirvan para financiar al gobierno de turno.

La caja fiscal deberá ajustarse a la realidad de la economía nacional para ir bajando el peso de la deuda pública. Desde el 2019 se ha emprendido en un proceso de reducción del presupuesto estatal, pero aún es insuficiente. El Gobierno prevé dejar al nuevo Régimen un presupuesto de alrededor de USD 29 000 millones, lo que implicará un ajuste al gasto cercano a los 3 000 millones.

Aunque un recorte del gasto público no es recomendable en medio de una crisis, es necesario empezar a dar señales de la viabilidad de las finanzas públicas. La tarea es compleja y requiere abordarse con responsabilidad en la campaña electoral.