Hinchas de Liga prendieron bengalas dentro del estadio al final del partido entre Liga y Barcelona el 21 de junio del 2017. Foto: Julio Estrella/ EL COMERCIO
Guillermo Almada, DT de Barcelona SC, se mostró algo molesto. Esperaba más en el estadio Rodrigo Paz, ante un equipo que es penúltimo y que hasta la noche del 21 de junio no mostró buen fútbol. Pero se encontró con un rival que corrió, que desgastó a sus pupilos.
“El empate me parece justo”, dijo el entrenador torero, mientras intentaba aclarar la garganta. Para el estratega uruguayo, quien fue expulsado antes del final del juego, Liga fue un rival que supo controlar a sus delanteros.
Tras el cotejo ya estuvo más calmado y se mostró optimista sobre los partidos que le restan a Barcelona en su afán de ganar la fase. “Nos habría gustado alcanzar la victoria, pero tomando en cuenta el partido el empate fue importante”, expresó.
“Dependemos de nosotros y resta mucho campeonato”, agregó el charrúa. Su equipo deberá enfrentarse todavía a Delfín y Emelec.
Por su parte, Gustavo Munúa destacó el apoyo de la gente. Se emocionó como hace mucho. Se llenó el estadio y al parece eso conmovió al DT. “Agradecemos al público. Fue infernal, estuvo infernal y los jugadores lo sintieron. Gracias por ese apoyo incondicional”, dijo el estratega.
Después analizó lo que fue este cotejo. Dijo que como jugaron será el camino para salir del fondo de la tabla. Al parecer ya está convencido de una alineación y un esquema táctico, porque anoche volvió a jugar con dos delanteros y tres volantes de corte.
“El partido del domingo es otro clásico lindo”, dijo el uruguayo, quien se emocionó y destacó la actitud de sus jugadores.