Como medida de “oxigenación” del mando de seguridad del Guayas, según determinó el viceministro del Interior, Diego Fuentes, los policías deberán cumplir obligatoriamente siete políticas para mejorar la imagen de los gendarmes.
Entre ellas, se prohíbe que los policías de Guayaquil, Daule y Samborondón, pertenecientes al Distrito de la Zona 8, consuman alcohol ni participen en los juegos de azar. Tampoco deberán ingresar a los centros de tolerancia, conocidos como night clubs, mientras no realicen operativos de seguridad.
Lo particular de estas dos señaladas medidas está en que los miembros policiales deberán cumplirlas incluso sin portar los uniformes que los identifiquen como policías.
El reglamento entró en vigencia imperativa con la llegada del nuevo comandante del Distrito Metropolitano de Guayaquil, Lenin Bolaños, quien durante una entrevista televisiva afirmó que “los reglamentos son políticas que han estado escritas”.
Según Bolaños, “un policía es un padre modelo dentro del núcleo familiar de la sociedad ecuatoriana (…) Imagine ver llegar a un burdel a un policía. Sería improcedente con nuestra ética profesional”.
La tercera medida refleja mantener en regla los documentos de conducción y utilizar los implementos de seguridad que se requieran. Además, los policías deberán portar correctamente los uniformes, empleando su gorra, chaleco reflectivo, chaleco antibalas e insignia policial.
Quienes incumplan estas políticas, serán sancionados por un mayor de la Institución.
La medida no nació por registrarse nuevas irregularidades, según el Viceministro, sino por el intento de refrescar el mando provincial. “Por eso la llegada del coronel Bolaños como comandante de la Zona 8”, recalcó.
Entre las últimas reglas que los gendarmes deberán cumplir con el propósito de desarrollar confianza ciudadana y restar irrespetos, están el no pedir ni recibir dinero para hacer cambios de servicio, además de no conducir ningún transporte público como taxis, o vehículos de alquiler particular.
El subteniente M. Vinces, del Circuito Portete (Guayaquil), respalda las medidas dispuestas por la nueva Comandancia. En cuanto al uso correcto de los uniformes, Vinces afirma que si el Estado es el garante de los implementos, es para utilizarlos diariamente, aunque “muchos no utilizan los chalecos antibalas porque las placas antibalísticas ya caducaron”. Sin embargo, siempre existe una manera de resolver las necesidades y así evitar incidentes trágicos, afirmó Vinces.
También señaló que las sanciones ante los posibles incumplimientos, son sancionados según el escenario de cada caso, con represiones simples, medianas, o de tercer grado.