Desde este fin de semana se podrá observar el cortejo de las ballenas jorobadas. Foto: Juan Carlos Pérez/PARA EL COMERCIO
Los vacacionistas de la Sierra tienen una ruta con siete lugares para el avistamiento de las ballenas jorobadas en Ecuador.
Estos cetáceos llegan a las costas pacíficas entre julio y septiembre de cada año. Pueden ser avistadas en ciertas partes de Manabí, Esmeraldas, Santa Elena y El Oro.
Los primeros en trasladarse desde las frías aguas de la Antártida son los machos juveniles. Aparecen en junio y apenas pueden ser percibidos por los pescadores, a ocho millas de los puertos.
Pero a finales de junio arriban las ballenas adultas, que viajan más de 8 000 kilómetros hasta las aguas cálidas del Pacífico para aparearse y tener a sus ballenatos.
Cristina Castro, directora de investigación de la fundación Ecuador de Pacific Whale Foundation, señala que en ese último grupo también llegan las ballenas preñadas, que tras una espera de 11 meses de gestación retornan al Pacífico para parir.
El guía del parque Nacional Machalilla, Germán Muñoz, explica a sus turistas que las ballenas que viven en la Antártida -en su mayoría- se conciben y nacen en Ecuador.
Castro indica que el número de ballenatos que nacen en Ecuador es difícil de cuantificar, porque cada año ese proceso es diferente.
Sin embargo, la fundación tiene un inventario que registra la llegada de entre 400 y 600 ballenas a Puerto López cada año. Es por eso que esa ciudad manabita es considerada como el santuario de las ballenas. “El registro aún está incompleto, pero tenemos conocimiento de que Puerto López es el lugar donde hay más ballenas en Ecuador”.
Según el biólogo Jorge Samaniego, desde la Antártida pueden salir hasta 6 000 jorobadas cada año con rumbo hacia el océano Pacífico. La predilección por las costas manabitas se debe a las bajas profundidades, los numerosos arrecifes, la geología ecuatoriana y en gran medida a la temperatura del agua.
Castro comenta que en 20 años de investigación, ella ha podido captar con su cámara a unos 4 000 ejemplares.
En la ruta de las ballenas en Ecuador, el turista también puede fotografiarlas. Muñoz señala que a partir de este fin de semana se pueden tomar las mejores fotografías, porque las ballenas empiezan su cortejo y para eso dan grandes saltos. “Los turistas disfrutan de la sorpresa, ya que nunca saben por dónde van a salir y a veces solo se escucha el chapuzón”.
La turista suiza Nathalie Ruech hizo el tour de las ballenas en Puerto López, la semana anterior. Es una experiencia única, dice. “No podía quitar mis ojos del mar porque en cualquier momento las podía ver. Son inmensas”.
En el tour de Puerto López también se pueden observar piqueros y hacer buceo. El viaje dura tres horas. Se debe navegar unos 40 kilómetros hasta la isla de la Plata.
En cada una de las provincias, los operadores de los tour para las ballenas están obligados a cumplir algunos parámetros de seguridad para los turistas.