María Paula Romo, ministra de Gobeirno. Foto: Patricio Terán/ EL COMERCIO
La ministra de Gobierno, María Paula Romo, habla en una entrevista sobre las protestas en el Ecuador.
¿Cómo juzga los 12 días de crisis?
El tiempo, las investigaciones y la justicia nos permitirán reconocer todo lo que ha pasado. Lo que coincidió fue un intento de desestabilización al Gobierno, un intento de golpe desde fuerzas violentas, porque no era un golpe político, no eran los partidos políticos, eran centenares de personas atacando rastrillos militares, pozos petroleros, reservorios de agua, antenas de comunicaciones, una escuela de Policía, medios de comunicación. Eso es lo que ocurre en un escenario de guerra. Al coincidir con una protesta social, se le otorgaba legitimidad.
El Ejecutivo tomó una decisión estratégica cuando cambió la sede del Gobierno a Guayaquil, porque impidió que una marcha termine con el orden democrático… ¿Estaba planeada esa acción?
Lo que se hizo en estos días fue contener el derrocamiento de un gobierno, un escenario en el que en otras circunstancias habría derivado en eso. ¿Estaba preparado con antelación el cambio de sede? No. Para nosotros, entre los escenarios de reacción de ninguna manera pudimos prever la escalada de violencia. Tomamos decisiones sobre la marcha, el presidente Moreno prefiere la prudencia a la confrontación.
¿Hubo acciones concertadas entre dirigentes sociales y grupos violentos?
Espero, en los próximos días, que las investigaciones que tiene que conducir Fiscalía nos den certezas sobre el nivel de coordinación entre varios sectores sociales, autoridades locales, nacionales y fuerzas que están fuera del Ecuador. Los indicadores más elementales y tendencias en redes en contra del Gobierno se levantaban en Venezuela, algunos ataques tenían IP en Rusia. Espero que las investigaciones nos den una certeza sobre el nivel de concertación. Yo creo que existió. ¿Todos los involucrados estaban conscientes de lo que jugaban? Me parece que no. Creo que eso se tendrá que demostrar.
¿La información que tienen sobre estas concertaciones irán a la Fiscalía?
Muchas cosas ya están en la Fiscalía. Otras se iniciaron de oficio, hay muchas denuncias que pondremos nosotros, noticias de delito para ser exactos, hay ciudadanos que pondrán sus denuncias y otras investigaciones se van a derivar de lo que se descubra. Hay mucho que esclarecer por la administración de justicia.
Hubo extorsión a dueños de florícolas a quienes les cobraron para no destruir sus plantaciones. El hecho de respetar una ambulancia es una regla elemental, aun en contextos de guerra, que haya sanciones para quienes atacaron ambulancias es fundamental. En el tema de secuestros, el país presenció varios y otros que no vio, solo de policías hubo 202 secuestros, hubo periodistas secuestrados.
¿Falló inteligencia?
Así es. No sé si en todo, pues confluyeron varios factores; porque muchas cosas sucedieron fuera del país, pero sí, inteligencia debió haber tenido reportes y alarmas sobre este tema, mucho más claras que las que tuvimos.
¿Hubo alertas?
Hubo pocas alertas sobre este tema. Nada en comparación a lo que sucedió.
¿Y cuáles serán las acciones del Gobierno?
No las voy a anunciar. Se van a tomar.
Había momentos en los que la Policía actuaba con una represión excesiva.
No comprendo su juicio de valor.
Hay estándares en el Ecuador. En esta ocasión no se utilizaron armas letales sino disuasivas, pero fue muy dura y eso da la visión de una represión fuerte comparando con ese estándar del país.
Hay estándares que ha tenido el Ecuador también sobre la protesta. Frente a una protesta pacífica, la Policía la disolvía. No existió la misma dinámica del lado de la protesta. La violencia en las calles no fue a la que la Policía suele responder. Estuvo fuera de cualquiera de nuestros antecedentes. Una noche estallaron un tanque de gas, hubo el tema de los voladores utilizados como proyectiles. La Policía en ningún caso utilizó armas letales, sino fuerza disuasiva. ¿Enfrentamientos muy violentos con la Policía? Sí, tenemos 434 policías heridos y eso da cuenta de la violencia.
Pero hay analistas que sugieren que hubo actuaciones dirigidas para causar mayor represión.
Esto siempre puede suceder, pero yo no lo valoro como algo sistemático y que tuvimos un gran grupo haciendo eso. Siempre puede suceder que alguien pierda los papeles, podría suceder que esté concertado con algunas personas, podría suceder…
¿Y van a investigarlo?
Cuando llegue el momento vamos a investigar y a evaluar. Tiene que venir el momento de las evaluaciones, pero me niego a que la evaluación esté enfocada en términos aislados. La Policía contuvo un intento de desestabilización democrática durante 12 días sin haber disparado una bala. Esa es una valoración más justa.
Después de esto, puede aparecer subversión urbana o que en el agro se proteja con paramilitares. ¿Qué va a hacer el Gobierno?
Lo que vimos en estos días bien puede ser el germen de estos temas o la demostración de que ya están aquí, frente a eso hay dos cosas que tiene que hacer el Gobierno. Por un lado seguridad, control, inteligencia y no impunidad y por otro lado reconstrucción del tejido social, la reconciliación.
Hoja de vida
La Ministra de Gobierno tiene 40 años y está en ese cargo desde el 3 de septiembre del 2018. En el 2004 fundó el movimiento Ruptura de los 25.
En el 2007 fue asambleísta constituyente y también legisladora en el periodo 2009-2013. Formó parte del buró político de Alianza País.
Es abogada por la Universidad San Francisco de Quito y tiene un PhD en la Universidad de Salamanca, España.