‘Escapar del petróleo significa salvar el planeta’
Olga Imbaquingo. Corresponsal en Nueva York
La humanidad sufre un voraz apetito por el petróleo. ¿No hay un doble estándar cuando solo se culpa de los desastres ambientales a la industria petrolera? ¿No se debería además cuestionar nuestro estilo de vida?
Estoy de acuerdo, todos tenemos un grado de culpa. Empero, la industria ha tenido la responsabilidad moral de no derramar el agua producida (NDLR el agua producida sale del subsuelo junto con el petróleo) y sí de reinyectarla al subsuelo aunque sus ganancias se reduzcan.
En su libro ‘El oculto precio del petróleo’ culpa al agua producida de los desastres ambientales. Usted que trabajó para varias industrias petroleras ¿cree que estas deliberadamente contaminan los ríos y los suelos con agua producida?
Las corporaciones solo son responsables de sus ganancias y su objetivo es que los costos de producción del petróleo sean baratos. La obligación es de los gobiernos de aplicar regulaciones anticontaminación en el proceso de producción de crudo.
Hoja de vida
David Lincoln
Su experiencia. Trabajó en 20 países durante 35 años para distintas corporaciones petroleras, entre ellas la Chrevron-Texaco como ingeniero. Acaba de publicar el libro ‘El precio oculto del petróleo: de Nueva Orleans a Indonesia’.
Su punto de vista. Las petroleras no tienen incentivos para hacer un análisis químico detallado del agua o de los impactos en la salud.
¿El agua producida causó la tragedia ambiental en la Amazonia, donde Texaco operó por más de 20 años?
Sí, esa agua es un contaminante que debe reinyectarse al subsuelo. Entre más tiempo de producción tiene un pozo, sale más agua que crudo. Chevron-Texaco en vez de deshacerse de esa agua bajo normas ambientales escogió derramarla tras un ligero o ausente tratamiento con el objetivo de ahorrarse dinero. La esperanza era que nadie tome en cuenta los efectos tóxicos. Pero algunas toxinas como los hidrocarburos aromáticos policílicos pudieron elevar el riesgo de cáncer unas 10 000 veces más.
¿Los demandantes están en su derecho de reclamar una millonaria indemnización por parte de la firma Chevron-Texaco?
Los afectados merecen una compensación, pero deben ser realistas. En Bhopal, India, en 1984 más de 3 000 personas murieron por un gas venenoso y unas 25 000 más fallecieron por enfermedades relacionadas por ese gas. En 1989, India redujo el reclamo de USD 3 000 millones a USD 500 millones. En Alaska, el reclamo a Exxon-Valdez bajó de 5 000 millones a menos de 400 millones para compensar a 33 000 pescadores. El caso de Ecuador una vez que sea sentenciado, a favor o en contra, debe venir a California donde la petrolera tiene jurisdicción. Aquí el caso probablemente será desechado. Creo más en un acuerdo extrajudicial por unos 300 ó 400 millones, sería lo mejor que los afectados pueden esperar.
Antes de que sea demasiado tarde, usted sugiere la aplicación de un impuesto, ¿en qué consiste esto?
Las dos terceras partes de reservas de petróleo están en el Medio Oriente. Esto da a los productores la capacidad de elevar el precio contrayendo la oferta y de bajar cuando pensamos en alternativas para reemplazar al petróleo. Un impuesto crearía un precio base para que las innovaciones de energía avancen aun cuando el precio del crudo baje.
¿Qué tanto de reservas de crudo queda y qué pasará cuando se acaben?
Los ocho mayores exportadores que no son de la OPEP desde 2007 experimentan una reducción de exportaciones. México, el tercer gran exportador hacia EE.UU., podría convertirse en importador a partir de 2012. Nadie sabe cuándo el mundo alcanzará su pico más alto en producción, que es también cuando comienza la curva de descenso, pero creo que será pronto. Debemos acelerar la vía de escape del crudo por el bien del planeta.
¿Cuál es la relación entre agua dulce y petróleo?
Menos del 1% del agua en el planeta es para consumo. Según la ONU, para la mitad de este siglo unos tres cuartos de la población podrían sufrir de escasez del líquido. El agua producida por los pozos petroleros es muy salada y con alto contenido de metales, por ende no apta para el consumo humano. Por eso no debemos permitir que más de
8 400 millones de galones de agua producida contaminen cada día las fuentes de agua pura.
La industria del petróleo irá en busca hasta la última gota de crudo sin ninguna responsabilidad. ¿Quién debe velar por la salud del planeta?
Cada Gobierno tiene la obligación de proteger las fuentes de agua y la salud de sus habitantes. No deberían dejarse adormecer por las promesas y garantías vacías de la industria petrolera. Ellos son los llamados a demandar pruebas constantes del trabajo. Deberían estar dispuestos a cancelar contratos si no cumplen con los estándares.