Una nueva variante del covid está ya en Ecuador. El Ministerio de Salud informó sobre casos registrados en la provincia de Cotopaxi.
La vacunación está disponible para los grupos vulnerables, en los centros de salud a escala nacional.
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¿Cuáles son las alertas de la nueva variante de covid en Ecuador?
Los síntomas de la variante son similares a los de una gripe estacional. Estos incluyen fiebre, dolor muscular, de cabeza, escalofríos y problemas respiratorios.
Hay una consideración, pues, la variante también puede existir pérdida de olfato o gusto, y síntomas gastrointestinales.
De acuerdo con el Ministerio de Salud, la variante, aunque no ha demostrado ser grave, es muy contagiosa. Por eso, si una persona presenta síntomas respiratorios, debe adoptar las medidas de bioseguridad como: higiene de manos, uso de la mascarilla y mantener el aislamiento
La institución informó que mantiene activa la vigilancia epidemiológica comunitaria para una respuesta oportuna. La vacunación contra el covid-19 está activa en los centros de salud a escala nacional.
¿Cuál es la nueva variante?
Ecuador registra la variante FLiRT, la nueva derivación del covid. Ya se identificaron dos casos en la semana epidemiológica 23.
El primer caso se registró en un paciente masculino de 24 años y el segundo, femenina de 42 años. Los dos cuentan con la cobertura de dosis de vacuna contra el covid. No registran antecedentes de patologías y se encuentran estables en sus domicilios.
La vacunación en Ecuador
En junio de 2024, el Ministerio de Salud realizó una inversión de unos 8 millones de dólares en vacunas con tecnología actualizada para cepas actuales de covid-19.
La vacuna está actualizada para la variante Pirola. No obstante, da protección para cualquiera de las cepas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya recomendó la vacuna covid-19 como estacional, que se debería aplicar una vez al año, para la población vulnerable.
La población de riesgo o vulnerable la comprenden los niños de seis meses a 4 años, adultos mayores, personas con enfermedades crónicas, como diabetes, cáncer, cuidadores de adultos mayores, policías, bomberos, personal de salud, mujeres embarazadas, entre otros.