Pese a las adecuaciones de última hora que se hicieron en dos hospitales de Santo Domingo, los problemas estructurales y las falencias en la calidad de las atenciones salieron a la luz durante un recorrido que realizó el vicepresidente de la República, Alfredo Borrero.
El Segundo Mandatario inspeccionó las instalaciones de las casas de salud Gustavo Domínguez y Santo Domingo junto a un equipo del Ministerio de Salud, este martes 7 de septiembre del 2021. También, estuvo en el hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social.
En el primer sanatorio verificó, por ejemplo, daños en el tumbado debido a la falta de mantenimiento. Además, escuchó las quejas de pacientes que no reciben medicinas y que deben comprarlas en las farmacias contiguas al hospital.
Borrero dijo que fue testigo de inconvenientes pequeños como en la selección de citas en especialidades y entrega de ciertas medicinas que, pese a que las hay, no se las provee a los usuarios.
“Los problemas son estructurales, estamos solucionándolos”, escribió más tarde en sus redes sociales.
Una mujer aprovechó el paso del Vicepresidente por la sala de espera del hospital Santo Domingo para contarle su situación. La paciente le dijo que la casa de salud no tiene medicina para atender la epilepsia que padece su madre, a la cual llevó nuevamente este martes en busca de atención médica, pero sin una respuesta total a su requerimiento. La madre de familia esperaba que le proveyeran del medicamento carbamazepina para controlar los episodios de convulsión que sufre en cada crisis.
El vicepresidente Borrero preguntó si eso era cierto y los funcionarios de la casa de salud asintieron luego de que la paciente indicara que se ve obligada a comprarlos en farmacias particulares.
Otro de los reclamos sucedió con las personas que son tratadas por problemas psiquiátricos.
Un grupo de mujeres contó que el hospital no tiene los frascos de risperidona, que son necesarios para contrarrestar la ansiedad o para conciliar el sueño. “Este gotero es muy caro señor Vicepresidente. Tampoco lo venden fácilmente porque es un estupefaciente que no se lo consigue en todas partes”, replicó una usuaria.
En el área de emergencia del hospital Santo Domingo se verificaron problemas por la falta de médicos. Se constató que solo existe un profesional para la atención, quien debe turnarse para las citas en medicina interna.
Los pacientes que llegaron este martes señalaron que deben esperar hasta siete horas para ser recibidos por el galeno. Algunos abandonan el lugar porque la atención no es ágil y pierden sus citas.
El Segundo Mandatario aseguró tras el recorrido que gestionará una compra emergente de medicinas y también habló de los convenios que están en marcha con farmacias privadas para que provean de medicinas a los enfermos.
Funcionarios de ese sanatorio aseguraron que se les ofreció subir el presupuesto a USD 7 millones anuales para solventar los problemas que hay por la falta de personal médico.