Basilea. DPA
El serbio Novak Djokovic asaltó ayer al suizo Roger Federer en su propia casa para hacerse con el título en el torneo de tenis de Basilea, donde el número uno del mundo había ganado los últimos tres años.
Djokovic, segundo cabeza de serie, derrotó por 6-4, 4-6 y 6-2 al número uno del mundo, que nació en la ciudad que alberga el certamen. El serbio ganó su cuarto título de la temporada. “Jugué el mejor partido de la semana cuando realmente lo necesitaba”, dijo el tercer jugador mundial, que ha ganado cinco de los 14 partidos disputados con Federer.
El serbio entró bien en el partido y consiguió el primer parcial mostrando gran consistencia en su saque. Sin embargo, Federer, que no perdía en Basilea desde 2003, no estaba dispuesto a romper la racha antes de tiempo.
El suizo recuperó la rotura de servicio y se llevó luego el segundo set por 6-4. Sin embargo, en el tercer set Federer cedió dos veces su saque y concedió una ventaja de 3-0 que le condujo ya irremediablemente a la derrota, la novena de 2009. “Es decepcionante perder una final en casa”, admitió el suizo. Pero reconoció la superioridad de Djokovic.