En Azuay, la atención es a medias
Redacción Cuenca
Ayer, en el Registro Civil de Azuay hubo inconvenientes por la suspensión del suministro eléctrico. Las discusiones entre usuarios y trabajadores de la entidad se registraron cerca de las 11:00. Los primeros querían que se respeten los turnos.
Entre las 07:00 y las 11:00, esta dependencia no atendió por la falta de energía y por no tener un generador eléctrico. A quienes llegaban en las primeras horas de ayer, se les informaba que por el corte la atención se reanudaría a las 11:00. Se entregaron 100 tiques para ordenar la atención.
Pero a la hora que regresó la energía (11:00), en las afueras del Registro Civil había unas 200 personas. La fila era desordenada y el sol era intenso, una característica de los últimos días.
Un grito desde la puerta alentó a María del Carmen Zaldumbide. Ella llegó para inscribir a su hijo Isaac, de dos meses. Hizo fila por 45 minutos y cuando escuchó: “Los que van a inscribir a niños hagan bien la fila y pasen”, dijo un “por fin”.
En las oficinas de la empresa Municipal de Telecomunicaciones, Agua Potable y Alcantarillado (Etapa), en el Centro Histórico, la atención se paralizó de 11:00 a 15:00. El apagón programado en esa zona empezó a esa hora y por no tener un generador, el servicio de pago de las planillas de teléfono y agua se suspendió.
En cambio, la atención en la oficina del IESS de Cuenca fue normal. Allí sí tienen un generador que les permite trabajar sin problemas durante cinco horas.
Según Ramiro Ordóñez, director provincial del IESS, se usa el generador casi toda la jornada. “Lo apagamos por dos horas para que no sufra algún daño”.
En la sucursal del Banco Nacional de Fomento, la atención también fue normal, porque hay un generador. Cuando la energía se corta toma unos 15 minutos hasta que se conecte.