Este 11 de octubre del 2017, un grupo de padres se concentró en los exteriores del plantel educativo para protestar contra las autoridades de la institución. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
Cuatro niños fueron violados por dos docentes en un colegio del noroeste de Guayaquil, de acuerdo con la Fiscal que lleva el caso, informaron este 11 de octubre del 2017 medios locales ecuatorianos.
La fiscal Patricia Morejón indicó que el Ministerio de Educación abrió una investigación y que tras someter a cuatro menores a exámenes médicos y psicológicos, estos determinaron que habían sido violados.
“De lo que nosotros hemos podido revisar el testimonio de una de las víctimas, los hechos son bochornosos, los hechos son terribles para los niños, para cualquier persona. Hubo abuso sexual”, indicó la Fiscal en una entrevista para la televisión.
La Fiscal no descarta que existan más niños afectados. Las autoridades evalúan a los estudiantes de dos aulas del establecimiento. Podría tratarse de “un centenar de víctimas“; el caso es “muy delicado”.
Según el Código de la Niñez y Adolescencia, constituye abuso sexual todo contacto físico, sugerencia de naturaleza sexual a los que se somete a un niño, niña o adolescente, aun con su aparente consentimiento, mediante seducción, chantaje, intimidación, engaños, amenazas o cualquier otro medio.
En la tarde del pasado 6 de octubre, el fiscal César Peña y la Policía especializada en niños (Dinapen) irrumpieron en el centro escolar tras las denuncias interpuestas por los padres sobre los delitos sexuales cometidos en el plantel.
Tras ingresar por la fuerza y tener que trepar por una puerta, porque los responsables les impidieron el acceso, uno de los supuestos autores de los delitos fue detenido, mientras que el segundo logró escapar.
Los sospechosos cometieron supuestamente los abusos en horas de recreo en los baños del colegio y habrían entregado a sus víctimas sedantes para cometer los actos y medicamentos para paliar las consecuencias, de acuerdo a las denuncias de los progenitores.
Al parecer, los supuestos autores también grabaron a sus víctimas. El Ministerio de Educación investiga la posible negligencia por parte de los responsables del centro al no reportar los hechos. El colegio no se ha pronunciado sobre la investigación.
La Fiscal sospecha que el abuso pudo haberse registrado no solo en este período lectivo, sino en años pasados. Por eso dice que, para determinar el alcance, “tenemos que investigar, ir un poco más allá del tiempo de esta semana, el tema es muy delicado”.